Diputados del PAN, Partido de la Revolución Democrática (PRD) y PVEM condenaron la violencia ocurrida en la explanada de la rectoría de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM) y llamaron a exhibir a quienes manipulan ese conflicto para otros fines.
El panista Marco Antonio Adame Castillo reconoció preocupación por lo que ocurre en la máxima casa de estudios y cuestionó que se utilicen métodos violentos que hoy mismo tienen en riesgo de paro a la UNAM.
“Han vandalizado instalaciones y no dan la cara. Eso no es una demanda que nosotros podamos acompañar”, subrayó el legislador del Partido Acción Nacional (PAN).
No obstante, llamó a las autoridades universitarias y del país para que prevalezca el diálogo constructivo, se respete la autonomía universitaria y se atiendan las demandas que sean justas.
Instó a repudiar la violencia como método para buscar soluciones en los ámbitos universitarios. “Eso es reprobable desde todos los puntos de vista”.
La lideresa de los diputados del PRD, Verónica Juárez Piña, urgió a las autoridades universitarias, así como de procuración y administración de justicia, cada cual en el ámbito de sus competencias, a atender y resolver a la brevedad el problema de violencia de género en instalaciones de esa casa de estudios.
Pidió que se concrete un diálogo con víctimas y denunciantes de ese problema, así como evidenciar y actuar en consecuencia contra quienes manipulan el conflicto para otros fines.
En entrevista por separado, consideró preocupante que haya grupos ajenos al problema y que aprovechan la falta de solución de las autoridades para emprender otro tipo de acciones.
Instó a identificar a esos grupos y actuar conforme la normatividad vigente, para lo cual se debe dar seguimiento y concluir lo antes posible las investigaciones que, según las autoridades, ahora sí ya están en curso, pero sobre todo insistió en que se resuelvan los problemas que originaron la suspensión de clases en varios planteles.
En tanto, los diputados del Partido Verde Ecologista de México (PVEM), Arturo Escobar y Ricardo Gallardo, coincidieron que hay «mano negra» en el conflicto universitario, con el propósito de generar inestabilidad, que de manera obscura se presentan utilizando sólo mujeres para defender una causa.
No obstante, admitieron que la causa es real y existente en la UNAM y “no sólo ahí, sino en varios sectores del país; esa es la parte preocupante”.
“Ese es un movimiento un tanto obscuro y un tanto sinuoso”, sostuvo Escobar y Vega.