Andrea Merlos, editora general de El Heraldo de México, informó que una de las propuestas de reforma que busca impulsar Alfonso Durazo, secretario de Seguridad y Protección Ciudadana, es que la policía privada se sume al trabajo de los servicios de la policía de seguridad ciudadana.
En conversación con Adriana Delgado para El Dedo en la Llaga, Merlos recordó que este fin de semana comenzó el periodo de sesiones en la Cámara de Diputados y Morena tiene “una gran lista de pendientes” en justicia, seguridad y financiera, mientras que el partido “está hecho pedazos”, por los cuales se cuela esa reforma a los policías.
Apuntó que en en ese sentido, hay dos frentes y se presentaron dos reformas en materia judicial, una por el Fiscal, Alejandro Gertz Manero, y otra del presidente de la Corte, Arturo Zaldívar, que tienen “caminos distintos”. Destacó que como no hay forma de conciliar las disputas internas de Morena, dejaron que el presidente Andrés Manuel López Obrador decida cuál reforma se va a impulsar.
Andrea Merlos consideró que la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN) “quiere tener más mano dura“, mientras que Fiscalía General de la República (FGR) “quiere ser todo poderosa“. Sin embargo, señaló que hay “cientos de casos” respecto a la FGR y la SCJN en que los casos se caen, debido a que para la Fiscalía debe hacer las pruebas y la investigación, en tanto que para la Corte son “trabajos mal hechos” que violan el debido proceso. Por ello, apuntó que la reforma judicial tiene objetivos muy diferentes.
“Elementos de seguridad privada tendrían que realizar actividades de policías con el mismo salario”
Asimismo, señaló que Alfonso Durazo presentó once reformas, pues quieren que 300 mil policías privados se sumen al trabajo de policías de seguridad ciudadana. Detalló que actualmente la guardia privada es la que labora en los edificios, plazas comerciales, conciertos, entre otros, y su tarea es cuidar bienes inmuebles, no a personas.
Por ello, calificó como una “locura” el que se busque que esos elementos que no están armados y no están capacitados se integren a actividades de la policía de seguridad pública, es decir, que si ven algún delito en la calle tendrían que participar o si les reportan un asalto tendrían que asistir. Además, tendrían que hacerlo con su mismo salario y con turnos de hasta 24 por 32 horas.