Ante las revelaciones de abuso de Marcial Maciel a menores durante su labor en los Legionarios de Cristo, el presidente Andrés Manuel López Obrador consideró que son graves los actos, pero que no se inmiscuirá en el tema.
El mandatario federal señaló que, en su carácter de jefe del Ejecutivo, debe mantener una buena relación con todas las Iglesias en el país.
“Es grave, no deben cometerse estos actos, pero buscar que se debata, se discuta, se analice en otros ámbitos. Que el presidente de México no se inmiscuya en estos asuntos”, comentó el mandatario federal en conferencia de prensa.
Señaló que los abusos del padre Maciel deben debatirse entre la sociedad y los medios. En el caso judicial, dijo, corresponde al Ministerio Público el acompañamiento de denuncias de las víctimas.
“Hay que tener buena relación con todas las Iglesias y hacer valer el Estado laico, donde todas las Iglesias tienen el mismo derecho y que el Estado debe garantizar la libertad religiosa”, señaló.
Hace unas semanas, la organización religiosa admitió que el padre Maciel y otros sacerdotes abusaron cuando menos de 175 menores.