Cuatro organizaciones campesinas irrumpieron este medio día en el Palacio de Bellas Artes para protestar por el cuadro de Fabián Cháirez, en el que se observa a Emiliano Zapata desnudo, montado sobre un caballo, con zapatillas y sombrero rosa
La obra forma parte de la exposición Emiliano: Zapata después de Zapata que se inauguró en el máximo recinto del país hace unos días.
El director del Museo de Bellas Artes Miguel Fernández intentó calmar a la multitud que se instaló en el loby y las escalinatas del recinto diciéndoles: “este es su museo, sean bienvenidos”, pero no lo dejaron continuar. Ante los gritos de “fuera, fuera”, amenazaron con en entrar a las salas de exposiciones para quemar el cuadro.
El vocero de quienes portaban banderas de la Central Independiente de Obreros y Campesinos dijo que el cuadro de Cháirez “era una ofensa a nuestros lideres porque pretenden quitar del imaginario colectivo la imagen de lucha revolucionaría de hace cien años. Deben de retirar esa pintura y toda la propaganda en redes sociales, porque es una denigración de nuestro líder revolucionario”.
Alvaro López Ríos, líder de la UNTA dijo a La Jornada que la exigencia del retiro de la obra, “no es homofobia, es una asunto de no permitir se denigre la figura de Zapata”.
Por eso integrantes de la agrupación “tomamos el Palacio de Bellas Artes. Esto lo consideramos ofensivo
y denigrante, en contexto del centenario de la muerte de Zapata”.
Añadió que “queremos que la quiten retiren de la exposición” Emiliano Zapata, después de Zapata.
López Ríos dijo que están convocando a más campesinos de todo México a que vengan a diario a manifestarse para qué quíteme esta pintura denigrante y ofensiva” y añadió que “como la puerta de Bellas Artes estaba abierta, nos metimos hasta la cocina en una manifestación pacífica” y advirtió que “no nos vamos hasta que la quiten”.
Continuaron con sus gritos de “Zapata vive, la lucha sigue” y aseguraron que si no retiran la pintura ellos no se irán de Bellas Artes.
Los integrantes de la la UNTA se encontraban a las afueras del congreso local, reclamando una baja del presupuesto para el campo en la Ciudad de México en 2020 de 4.2 por ciento.
Aunque de acuerdo a los campesinos la protesta sería pacífica, la llegada de activistas de la diversidad sexual para intentar dialogar derivó en que a las afueras de Bellas Artes se registraran agresiones en contra de los integrantes de la comunidad LGBTTI.
Los campesinos amagaron con regresar en los siguientes días, hasta que la pintura titulada La Revolución, en la que se observa al Caudillo desnudo, solo portando zapatos de tacón, un sombrero mexicano rosa y una cinta tricolor, sea retirada de la exposición.