La coordinadora de los alcaldes del partido Morena en Guerrero, Adela Román Ocampo, reveló que su homólogo de Zirándaro, Gregorio Portillo Mendoza, decidió, junto con un grupo amplio de ciudadanos, tomar las armas para defenderse ante la irrupción que hace unos días sufrieron por parte de un grupo de la delincuencia.
La alcaldesa de Acapulco, junto con otros ediles morenistas, acudieron al Congreso para reunirse con diputados de la Comisión de Presupuesto, tendiente a revisión de lo que se aprobará para el 2020, y el gran ausente fue el alcalde de Zirándaro, quien no pudo salir de su municipio por la crítica situación de inseguridad.
“Nos habló con preocupación desde ayer que no podría estar en la reunión porque el día anterior entró gente armada entró a su municipio, donde hay muertos, y en respuesta un grupo numeroso, junto con él, tomaron la decisión de armarse”.
Tras el amago del alcalde de Zirándaro, de armarse, la Mesa de Coordinación Estatal para la Construcción de la Paz exhortó al edil a sumarse a las tareas de las autoridades civiles y militares para facilitar los esfuerzos que garanticen la seguridad en ese municipio, situado en la región de la Tierra Caliente.
Se informó que “no se tuvo conocimiento que haya intentos de grupos armados de tomar la cabecera municipal, como ha informado el alcalde.
