El grupo parlamentario de Morena en la Cámara de Diputados sugirió y acordó la creación de una nueva Financiera Nacional Agropecuaria, que sustituirá la actual Financiera Rural como parte de las negociaciones con sus propios legisladores inconformes, quienes a la vez son líderes agrarios del país.
Mario Delgado, coordinador parlamentario; y el presidente de la Comisión de Presupuesto y Cuenta Pública en San Lázaro, Alfonso Ramírez Cuéllar; explicaron que la iniciativa es “un esquema novedoso para financiar al campo utilizando los mercados financieros que va integrar de manera estratégica todos los organismos que en estos momentos se dedican a apoyar al campo”.
Dicha iniciativa fue presentada en la Comisión Permanente por diputados de Morena desde mayo pasado.
“Es, en términos concretos, una banca agrícola que va a concentrar todo lo que tiene que ver con la contratación de coberturas, con el financiamiento y el apoyo en materia de seguros”, dijo Ramírez Cuéllar.
Precisó que “habrá recursos para el campo, pero no a través de los mecanismos tradicionales, no a través de sus líderes ni de intermediarios, acaparadores, comercializadores ni coyotes; sin moches. Se acabó el moche, ahora se atenderán directamente las necesidades de los productores directamente con ellos”.
Este nuevo organismo, que se prevé sea aprobado antes del 15 de diciembre, agrupará a la actual Financiera Nacional de Desarrollo Agropecuario, Rural, Forestal y Pesquero; al Fideicomiso de Riesgo Compartido (Firco) y al Fondo de Capitalización e Inversión del Sector Rural (Focir) en una institución de banca de desarrollo, que coordinará y vinculará todos los apoyos dirigidos al campo, indicó.
La propuesta fue bien vista y avalada por los morenistas inconformes plantados al exterior de la Cámara de Diputados.
Desde el 11 de noviembre, más de 5 mil campesinos de diversas organizaciones campesinas realizan un plantón en el Palacio Legislativo de San Lázaro, en espera de que los coordinadores parlamentarios lograran acuerdos con la mayoría de Morena para hacer los ajustes necesarios al Proyecto de Presupuesto, con la finalidad de atender sus demandas de recursos en programas de apoyo al campo.
