El sábado fue una jornada de exámenes médicos para el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, en el hospital militar de Walter Reed, en la periferia de Washington.
Su última revisión anual la había realizado en febrero, pero el inquilino de la Casa Blanca, de 73 años, decidió esta vez anticiparla en función del calendario electoral, según señaló la presidencia.
«Previendo un año 2020 muy cargado, el presidente aprovechó un fin de semana calmo para emprender su visita médica anual a Walter Reed», dijo su portavoz, Stephanie Grisham.
Su revisión del sábado consistió en «un rápido examen y muestras de laboratorio», señaló la vocera.