En el Buen Fin, que este año se realizará del 15 al 18 de noviembre, suelen incrementarse de manera importante el «robo hormiga» y la merma de productos en los comercios participantes, por lo que éstos ya están preparados para hacerle frente a personas y bandas organizadas que se dedican a este ilícito.
Para ello, los comercios han recurrido a la instalación de alarmas, antenas, detectores, cámaras de video vigilancia y otros instrumentos electrónicos (tecnología de última generación), así como a la contratación de personal visible y encubierto de seguridad privada.
Los artículos que más se roban en estas fechas, según lo muestran las estadísticas de años anteriores, son: teléfonos celulares, accesorios de telefonía y otros aparatos electrónicos y de alta tecnología, artículos perecederos, vinos y cigarros, perfumería, ropa, zapatos y tenis.
Por ello, los comerciantes han puesto en marcha una serie de medidas de prevención para revertir esta tendencia, de acuerdo con el XIX Censo Nacional de Mermas y Prevención de Pérdidas del Mercado Minorista 2019, realizado por una empresa de sistemas de seguridad.
Entre ellas destaca la protección destinada a artículos de tecnología y electrónica, para lo cual se ha incrementado en 58 por ciento el presupuesto, lo que significa que los comerciantes han invertido más de la mitad de sus recursos destinados al cuidado de mercancías.
Las medidas de prevención están orientadas a combatir tanto el robo interno como externo de mercancías; el primero es el que realizan personas que trabajan en los mismos comercios, es decir, es practicado en 68 por ciento por los propios empleados.
En tanto, el robo externo, lo realizan en 68 por ciento bandas organizadas y sólo 32 por ciento es generado por personas de manera individual.
Gracias también a estas medidas de prevención, las mermas y el robo de artículos en comercios ha disminuido en el último año al pasar de 1.78 por ciento en 2017 a 1.64 en 2018, es decir una baja de 0.14 por ciento.
