El tercero y último fin de semana largo del año, del 16 al 18 de noviembre, dejará una derrama económica superior a 4 mil 904 millones de pesos, estimó el titular de la Secretaría de Turismo federal (Sectur), Miguel Torruco Marqués.
En ese periodo se espera que 1 millón 813 mil turistas se hospedarán en algún hotel del país para una ocupación promedio de 67 habitaciones por cada 100 disponibles.
El lunes 18 se considerará día inhábil para conmemorar el inicio de la Revolución Mexicana. La Ley Federal del Trabajo establece tres fines de semana largo: el primer lunes de febrero para recordar la promulgación de la Constitución de 1917 del 5 de febrero; el tercer lunes de marzo, que celebra el natalicio del presidente Benito Juárez, y el tercer lunes de noviembre.
Torruco Marqués precisó que los fines de semana largo contribuyen a “la convivencia familiar, al incremento del turismo interno y el consumo doméstico”. Los tres periodos de asueto impulsan la cadena productiva y beneficia a la población local, sobre todo aquella que habita en algunos de los destinos turísticos del país.
