El presidente Andrés Manuel López Obrador ratificó que nadie de su familia o amigos están autorizados para hacer gestiones. Consideró que “los conservadores, sus voceros, sus medios, están últimamente muy nerviosos, como desquiciados, inventando cosas. Vuelan mucho.
“Entonces hay que serenarnos y hay que actuar con objetividad, con profesionalismo, con respeto a los ciudadanos, desde luego haciendo pleno uso de la libertad de expresión”, señaló en su conferencia de prensa.
Afirmó que se tiene que probar que su hermano Pío López Obrador intervino –como se señala- para que 21 alcaldes de Chiapas se sumaran a Morena a cambio de presupuesto, créditos y supuesta protección ante la Auditoría.
Esto último, dijo, “como que pinta para calumnia, por aquello de que la calumnia cuando no mancha tizna. Está mal que familiares, que amigos, tomen esas decisiones, pero hay que ver si es cierto”.
Insistió, como estableció en su carta del 13 de junio pasado, que no debe de haber influyentismo, amiguismo ni nepotismo. “Ninguna de esas lacras de la política”.
Subrayó que nadie de su familia está autorizado para realizar gestiones. “Hay un memorándum que di a conocer acerca de cómo ningún familiar, nadie vinculado a mí, familiar o amigo, puede cometer en nombre mío ningún acto ilícito. Además, no sólo no deben hacerlo, sino que caerían en la esfera del derecho penal y serían juzgados”.