Pese a haber presumido salarios superiores a los 32 mil pesos a integrantes de la Policía de Michoacán en su último informe de gobierno, el gobernador Silvano Aureoles Conejo, reconoció la precaria situación económica de varios de los elementos que fueron emboscados el lunes en el municipio de Aguililla.
En rueda de prensa, el mandatario estatal pidió a medios de comunicación “no sacar ventaja del dolor de las familias de los policías caídos” al referirse a imágenes en medios de comunicación que mostraban ataúdes sostenidos sobre tabiques y sillas.
“Son familias de escasos recursos, y se me hace no conveniente abusar de esa condición. Son compañeros policías de familias muy humildes pero ayer mismo yo instruí para que se les ayude. Los compañeros policías vivían de su salario, al día, como muchas miles de familias, y esto no debiera ser un motivo para hacer escarnio y darle vuelo a una cuestión”, declaró.
Aureoles Conejo cuestionó la humanidad de las empresas informativas y el amarillismo que realizan algunos medios “a veces hasta por encargo” y pidió no usar esas cosas “para intentar desacreditar al gobierno y pegarle al gobernador”, cosa que, “no crean que la gente lo ve muy bien”.
Agregó que todas las familias de los 13 policías recibirán apoyo por parte del gobierno estatal y recordó que los hechos de violencia no sólo ocurren en Michoacán, sino que todo el país atraviesa una situación crítica de inseguridad, y citó lo ocurrido en Guerrero y Zapopan, en donde también hubo multihomicidios en las últimas horas.