El endeudamiento externo del sector público y las empresas privadas en México llegó en 2018 a un saldo histórico: 452 mil 991 millones de dólares (8.7 billones de pesos), que representan 35.8 por ciento del producto interno bruto (PIB), expuso el Banco Mundial (BM).
En ese año las tensiones políticas vinculadas al comercio con Estados Unidos redujeron los flujos de capital a los mercados financieros, recalca en un informe. México, que está entre los 10 mayores deudores en el mundo, vio un incremento tres veces mayor en el financiamiento a corto plazo.
En el desglose que realiza el BM, 65 por ciento de la deuda externa a largo plazo es del sector público, mientras la de empresas privadas que se financian fuera del país es de 42.2 por ciento, hecho que expone que uno de cada tres pesos de la economía contenida en el PIB está comprometido en el extranjero.
En el reporte International Debt Statistics, el organismo subraya que durante 2018 los sectores público y privado desembolsaron 22 mil 874 millones de pesos por pago de intereses, equivalentes a 5 por ciento del total de la deuda. El monto se redujo respecto de 2017 por efecto de mejores condiciones para lo que hace al pago del sector público.
Durante el año pasado cayeron en 2 mil 598 millones de dólares las entradas financieras a bancos comerciales. Es la reducción más alta de capitales desde 2016, año en que el presidente Donald Trump ganó las elecciones estadunidenses y se decidió la salida de Reino Unido de la Unión Europea.
El Banco Mundial subraya que en países de ingresos bajos y medianos el año pasado aumentó 5.3 por ciento la deuda externa, que alcanzó 7.8 billones de dólares, mientras el flujo de deuda neta (desembolsos brutos menos pagos del principal) de países que se caracterizan por ser los que prestan cayó un 28 por ciento, hasta llegar a 529 mil millones de dólares.
“Aunque, en promedio, la carga de la deuda externa de los países de ingresos bajo y mediano fue moderada, desde 2009 varios han experimentado un deterioro de la trayectoria de la deuda”, recalca el informe. Hace 10 años, 68 por ciento de los países mantenían endeudamientos por debajo del 30 por ciento del PIB, ahora están en dicha condición 75 por ciento.
“Para crecer con mayor rapidez muchos países en desarrollo necesitan más inversiones que se adapten a sus objetivos de desarrollo”, expresó David Malpass, presidente del Grupo Banco Mundial.