Desde hace 15 años operaban al interior de la Central de Abasto las rifas conocidas como Las Rapiditas que dejaban ganancias millonarias a diario.
Comerciantes explicaron que mujeres guapas eran las encargadas de vender boletos a 10 pesos a los comerciantes prometiéndoles premios de hasta 50 mil pesos mismos que nunca se entregaban.
Pedro Huerta Ramos, comerciante de plátano Tabasco en la Central de Abasto fue quien narró a los medios de comunicación el modus operandi ya que el director de la Ceda, Héctor Ulises García Nieto afirmó “no me consta”.
“Realmente a mi no me consta si era legal o no pero operaba para todos los comerciantes para el público en general vendían el boleto en 10 pesos pero si entregaban o no entregaban los premios tampoco me consta”.
Al preguntarle sobre las chicas que vendían los boletos y si se convirtió en una extorsión hacia las autoridades de la Central de Abasto también respondió: “no me consta, la Central de Abasto es tan grande que a veces no se entera uno de muchas cosas”.
Sin embargo, el comerciante Huerta Ramos afirmó: “había una nube de muchachas guapas que andaban vendiendo boletos en 10 o 20 pesos pesos para sacarse premios de 10, 15 y hasta 20 mil pesos ya no están por cierto, era eso que le denominan gota a gota pasaban a la bodega y decían un boletito te puedes sacar hasta 50 mil pesos, anteriormente los comerciantes lo compraban pero nunca entregaron premios”.