La construcción del muro que quiere el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, en la frontera con México afectaría áreas protegidas por la Unesco.
La organización internacional dijo que la extensión de la valla pega al Monumento Nacional Organ Pipe Cactus, en Arizona, que es parte de la reserva de la biósfera internacional reconocida por el organismo. Las obras también tocan territorios de Texas, Nuevo México y Arizona, por lo que también daña al refugio nacional de Cabeza Prieta y al área de conservación de San Pedro, indica el medio británico «The Guardian».
Luego de que el gobierno republicano obtuvo fondos destinados para proyectos de Defensa Nacional, se realizó una extensión de 280 kilómetros de la barrera entre Estados Unidos y México.
Amanda Munro, del Centro Ambiental Southwest, dijo que se «arrasará con una de las regiones con mayor diversidad biológica en la Unión Americana (…) Puede ser un error colosal y una tragedia nacional».
En Organ Pipe viven especies en peligro de extinción, como leones de montaña, jabalíes americanos, antílopes y «muchas especies de aves», de acuerdo con el Servicio de Parques Nacionales.
Kevin Dahl, de la Asociación para la Conservación de Parques Nacionales, dijo que «esta plaga usará agua para su construcción», por lo que especies de vida silvestre se verán afectadas.
La nueva construcción, dice Dahl, reemplazará rejas que pueden ser atravesadas por los animales. Está el riesgo de que las obras impidan su inmigración, corten su suministro de agua y aumenten las inundaciones.
«Ellos no pensaron el diseño», dijo Dan Millis, coordinador del programa de conservación Sierra Club.
Las obras también dañarán Quitobaquito Springs, un oasis en la frontera donde viven peces y tortugas en peligro de extinción.
Dahl dijo que estas zonas son «verdaderas gemas del desierto en Sonora (…) sería una pena que se perdieran por un muro innecesario».