El Gobierno federal encabezado por Andrés Manuel López Obrador decidió cancelar la cena de lujo para la noche del 15 de septiembre. A cambio, solo habrá un convivio con antojitos mexicanos y aguas frescas.
Así lo dio a conocer este martes Zoé Robledo, director del Instituto Mexicano del Seguro Social. Agregó que esto es con la finalidad de privilegiar la fiesta que se realizará en el Zócalo capitalino.
Al dar a conocer el programa de actividades para las fiestas patrias, el funcionario adelantó que la noche del Grito en Palacio Nacional incluirá simplemente “aguas frescas en vitroleros de sabores varios y nada más”.
La celebración del Grito de Independencia la noche del 15 de septiembre solía reunir al gabinete legal y ampliado, representantes de los poderes legislativo y judicial, así como a líderes empresariales, artistas, deportistas y otros tantos invitados especiales.
Sin embargo, poco a poco ha dejado de ser una costumbre que fue instituida por Porfirio Díaz en 1896, en donde el presidente en turno organizaba una cena de gala y otras amenidades en los patios de Palacio Nacional.
Enrique Peña Nieto canceló desde 2015 la cena de gala (argumentando razones de austeridad), pero en los primeros dos años de su gobierno sí los realizó.
Según el portal de Obligaciones de Transparencia del Gobierno federal, en septiembre de 2013 la celebración tuvo un costo de 17 millones 422 mil pesos, entre la organización de la verbena popular en el Zócalo, la animación y la cena para 780 invitados. De igual forma, en 2014 se gastaron 18 millones 996 mil pesos.
Durante el primer año de gobierno de Felipe Calderón, la celebración tuvo un costo de 21 millones 987 mil pesos, en donde ofreció una cena para 2 mil 300 invitados.