El director, productor y guionista mexicano, Guillermo del Toro, develó este martes su estrella en el Paseo de la Fama de Hollywood e invitó a todos aquellos que se sientan raros a visitarla.
El originario del estado de Jalisco quiso aclarar dos cosas antes del acto: que era raro y que era mexicano, posteriormente se hincó ante su estrella y besó la bandera mexicana para de esta manera posar ante los medios de comunicación.
Tras complacer con varios autógrafos, la ceremonia inició y la cantante Lana del Rey y el realizador J.J. Abrams fueron los oradores y le dedicaron algunas palabras al cineasta.
Un pedacito de él es lo que ha quedado plasmado en el icónico boulevard de Hollywood, así fue como lo describió Del Toro al momento de cederle el micrófono.
«Hay dos cosas que quiero aclarar hoy sobre mí, número uno, soy raro y realmente agradezco la oportunidad que tenemos de ser así. Lo que siento con esta estrella es que la gente rara como yo puede estar aquí, eso me da esperanza».
«Esta estrella es para todos ustedes que se sienten raros, vengan y tómense un momento, no creo en la magia, pero sí puedo dejar algo de mí aquí hoy, así que estaré aquí espiritualmente para ustedes cada que quieran venir», expresó Del Toro.
Tras recordar la primera vez que visitó Hollywood, en la década de los 90 con su familia, señaló que la segunda cosa que deberían saber sobre él es que «soy mexicano y soy inmigrante».
«Como inmigrante, ver las estrellas de Pedro Infante y Katy Jurado significa mucho para saber quién estuvo antes», destacó el ganador del Globo de Oro, BAFTA, Goya y Ariel.
El realizador de Cronos, Mimic, El espinazo del diablo, Hellboy, El laberinto del fauno, Pacific Rim, Cumbre escarlata y La forma del agua, por mencionar algunas de sus obras, aprovechó la ocasión para decirle a la gente que no tenga miedo, que no caiga en provocaciones y se mantenga unida.