Luego de la disminución del presupuesto federal para el pago de servicios ambientales, el gobernador de Michoacán, Silvano Aureoles Conejo, invitó al sector aguacatero a pagar un impuesto para conservación ambiental por cada tonelada de exportación.
El mandatario estatal destacó que existen muchas personas que se aprovechan de los recursos naturales del estado sin intentar retribuir algo o nada de vuelta, por lo que considera que debería haber un tributo.
Mientras unos andan protegiendo, otros nada más se quieren hacer ricos pero no quieren aportar nada, se sirven de la tierra, de los árboles, del agua, los aguacateros deberían de voluntariamente establecer una pequeña cuota, un impuesto para la conservación.
Indicó que si los aguacateros echaran mano de los recursos que utilizan para pagar “moches” a la delincuencia organizada, habría sustentabilidad económica al menos en el tema del agua.
El funcionario señaló que desde hace más de 20 años se han instalado huertas ilegales de aguacates, pues no se cuenta con los permisos de cambio de uso de suelo de parte de la Secretaría de Medio Ambiente, Cambio Climático y Desarrollo Territorial.
En ese sentido, exhortó al sector aguacatero a regularizarse, pues informó se creará en el futuro próximo el impuesto.