La Secretaría de Cultura pidió a Louis Vuitton aclarar la elaboración de diseño de un silla que forma parte de su colección Dolls by Raw Edges.
«Nos hemos enterado con sorpresa de que en la colección Dolls by Raw Edges de su firma, aparece una silla (modelo R98619) en la que se reproducen elementos que forman parte y se identifican con los bordados que se elaboran y son propiedad intelectual de la comunidad de Tenango de Doria, en el estado de Hidalgo, así como de sus artesanos», señala la secretaría una carta fechada el 5 de julio, enviada a Héctor Pardo, director de Comunicación de la firma.
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La titular de la dependencia, Alejandro Frausto, propone a la firma realizar una mesa de diálogo en la que participen tanto autoridades culturales mexicanas, artesanos como empresa, con el objetivo de alcanzar acuerdos que beneficien a todos los involucrados. Además de dar el “debido reconocimiento a la comunidad en la cual se efectuó la apropiación cultural“.
En abril pasado, la casa francesa de moda lanzó al mercado una colección de sillas de diseño en colaboración con el estudio Raw Edges, entre las que destaca una decorada con motivos coloridos propios de los diseños de Tenango de Doria, Hidalgo.
La silla se ofertó en el sitio web de Louis Vuitton a un precio de 12 mil 800 libras esterlinas, más de trescientos mil pesos mexicanos
Ante la polémica causada por diversos diseñadores que han retomado motivos de comunidades mexicanas para sus creaciones, la senadora Susana Harp propone iniciativas para la protección de la propiedad intelectual colectiva y los derechos culturales de los pueblos originarios del país.