El presidente cubano, Miguel Díaz-Canel, calificó como inmoral, mentirosa y perversa la decisión del gobierno de Estados Unidos de incluir a la isla en la lista de países que fomentan la trata de personas.
En su cuenta de twitter, el mandatario cubano afirmó que los señalamientos de Washington son parte de las ideas conservadoras que imperan en ese país.
Por su parte, el canciller, Bruno Rodríguez, rechazó la decisión estadounidense y dijo que es otra calumnia para justificar nuevas medidas de hostilidad contra la isla y advirtió que Estados Unidos carece de autoridad moral para hacer evaluaciones o calificaciones de países.
Puntualizó que Cuba se distingue por una política de tolerancia cero y desempeño ejemplar en la prevención y combate a la trata de personas con baja incidencia de este flagelo.
Para justificar la inclusión de Cuba, por primera vez, en esa lista, la administración de Donald Trump señaló que el gobierno de la isla no cumple completamente los estándares mínimos para la eliminación del tráfico de personas y no realiza esfuerzos significativos para ello.
En concreto, Washington se refirió a las supuestas malas condiciones de trabajo de los médicos cubanos que participan en brigadas enviadas a países con necesidades de personal o con crisis epidémicas, especialmente en África y América Latina, labor que ha sido reconocida por la Organización Mundial de la Salud.