Ante representantes de la banca, el titular de la Secretaría de Hacienda y Crédito Público (SHCP), Carlos Urzúa Macías, manifestó su confianza en lograr la meta sexenal de crecimiento de 4.0 por ciento en promedio.
“Creo que este 4.0 por ciento seguramente se dará si no tenemos estos sobresaltos a lo largo de los siguientes años y si el gobierno mexicano sigue actuando con cierta prudencia”, agregó en la Reunión Nacional de Consejeros Regionales 2019 del Grupo Financiero BBVA.
Afirmó que para lograr un crecimiento de la economía mexicana mayor y a tasas “razonables” es necesario lograr que la inversión del sector privado represente 28 por ciento del Producto Interno Bruto (PIB), desde su nivel actual de 22 por ciento.
Por su parte, dijo Urzúa Macías, el gobierno requiere dedicar más recursos a la inversión pública de calidad, a la infraestructura y tener mayor recaudación.
El encargado de las finanzas públicas destacó que el presidente Andrés Manuel López Obrador es conservador en cuestiones fiscales, “no es una persona que le guste realmente ver que se disparen los gastos relativo a los ingresos”.
Por ello, el objetivo es mantener la deuda pública en alrededor de su nivel actual de 45 por ciento del Producto Interno Bruto (PIB) o incluso una tendencia decreciente, para lo cual se buscará lograr superávits primarios durante todo el sexenio.
Así como el Banco de México (Banxico) tiene como objetivo de inflación de 3.0 por ciento, más/menos un punto porcentual, la meta principal de la Secretaría de Hacienda es un superávit primario porque “no queremos que se nos dispare la deuda”.
Subrayó la importancia del sector financiero y la necesidad de bancarizar al país, pero sobre todo, dejar de usar lo más rápido posible el efectivo; “eso nos va a dar muchísimas ganancias de todo tipo, inclusive para combatir el lavado de dinero y la corrupción”.