Por Nidia Marín
Errante, condenado a vagar por la tierra con una marca en la frente, mientras el agente naranja siga dirigiendo la política estadounidense, está México, tras el anuncio de aumento de aranceles desde hoy… Sí, surtió efecto la amenaza de mitin, pero… al contrario.
No hay para donde hacerse y menos cuando la sinrazón rige en ambos lados del Río Bravo, no los argumentos sensatos.
Usando las palabras como flechas envenenadas es imposible llegar a acuerdos. Bien harían ambos mandatarios en recordar aquella frase lanzada por el entonces rey Juan Carlos de España, frente a Hugo Chávez:
“¡Por qué no te callas!”
Pero no, despotricar es lo suyo.
Y mañana veremos un evento, con todo y verbo, por el estilo del organizado en el zócalo de la Ciudad de México hace 37 años… después del llanto presidencial y el anuncio de la nacionalización de la banca.
Sin la presencia del mero, mero, el 3 de septiembre de 1982 las “fuerzas vivas” del país abarrotaron la Plaza de la Constitución.
Ahí estuvieron más de 500,000 manifestantes, convocados por la CTM, el PPS, el PST, el Sindicato Único de Trabajadores de la Industria Nuclear (SUTIN), el PSUM, el Frente Auténtico de los Trabajadores y 23 sindicatos independientes, mostrando su apoyo a la nacionalización de la banca.
Mientras tanto, el PAN entre machincuepas, desesperado reclamaba y responsabilizaba a un gobierno que estaba a punto de decir adiós… El sexenio de José López Portillo concluía.
Hoy, cuando el mandato sexenal cumple apenas los seis meses y ante la desunión extendida por la República gracias a los “palabrazos”, así como los epítetos del agente naranja, el mandatario en turno de México llama a la unidad y convoca a un mitin mañana en Tijuana. ¿Y ya para qué?
No se duda que muchos, doble cara, aprovechen el viaje para, ¡oh! Ironía, ir de shopping al otro lado…