Con escoba en mano, la jefa de gobierno capitalina, Claudia Sheinbaum, emprendió este sábado actividades de tequio en las inmediaciones del Metro Tacuba, donde habrá un reordenamiento de unos mil 500 vendedores ambulantes como parte del proyecto «Tacuba vive».
Sheinbaum indicó que las acciones se emprenderán no solo en el mercado, sino que además los vendedores ambulantes serían reubicados en el marco de dicho proyecto en una plaza, y al recuperar la zona también se establecerá un centro de transferencia modal para el transporte, pero de manera ordenada.
Ello, detalló, sumado al establecimiento de una plaza y un Punto de Innovación, Libertad, Arte, Educación y Saberes (Pilares) en el bajo puente cercano a la estación Tacuba del Metro; además de que se realizarán trabajos también en las calzadas México Tacuba y San Cosme.
“La inseguridad también se debe al deterioro, recuperando el espacio público y reconociendo este como un corredor histórico pero que al mismo tiempo puede renovarse, puede tener un potencial muy grande”, puntualizó la jefa de gobierno.
Por su parte, el alcalde Víctor Hugo Romo dijo que los vendedores ambulantes serían reordenados con un proyecto de inversión homogéneo con la Iglesia, la explanada y el comercio: “el comercio es parte de la identidad morfológica, antropológica de la zona, no se mueve, va a cohabitar, convivir, pero con una imagen diferente”.
El proyecto de “Tacuba Vive” involucra la explanada del Jardín Tacuba, con una inversión de 20 millones de pesos, así como otros 50 millones que serán destinados al Cine Cosmos e intervenciones en la escuela Normal, el árbol de la Noche Triste, y el Pilar del bajo puente, se trata de un proyecto de 80 millones de pesos, detalló.
En materia de seguridad, expuso que se atenderán inquietudes de los vecinos con mesas de trabajo; además se cuenta con el apoyo de la Secretaría de Seguridad Ciudadana que estableció seis grupos de trabajo en la zona y seis grupos de trabajo de la Policía Auxiliar.
Ello, sumado a la reapertura de dos módulos de policías en la zona; la colocación de un alcoholímetro en la entrada por avenida Moliere a los centros comerciales, con quienes se estableció comunicación preventiva con las personas que visitan estos lugares “estamos haciendo acciones conjuntas, esto no es de la noche a la mañana”.