El presidente Andrés Manuel López Obrador informó que esta mañana recibió un mensaje del empresario Carlos Slim, quien le expresó su apoyo luego de que el gobierno de Estados Unidos anunció que impondrá, a partir del 10 de junio, un arancel especial de 5.0 por ciento a todos los bienes provenientes de México.
“En la mañana la secretaria de Gobernación (Olga Sánchez Cordero) me mostró un mensaje de Carlos Slim expresando su apoyo, el de él y el de su familia, por poner un ejemplo, pero es en general, es todo el pueblo”, indicó durante su conferencia matutina en Palacio Nacional.
El mandatario señaló que las muestras de apoyo se empezaron a recibir desde anoche en las redes sociales, luego de que también se publicara la carta que se envió a Estados Unidos para intentar buscar una solución.
Ayer, el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, anunció una escala de aranceles, que iniciarán en junio en 5.0 por ciento y podrían llegar hasta el 25 por ciento en octubre, contra todos los bienes de provenientes de México.
En ese sentido, el mandatario mexicano le respondió que los problemas sociales no se resuelven con impuestos ni medidas coercitivas, y le propuso profundizar el diálogo y buscar alternativas de fondo al problema migratorio.
También, le propuso que funcionarios de Estados Unidos reciban a los representantes de México, encabezados por el canciller Marcelo Ebrard, quienes este viernes viajarán a Washington para llegar a un acuerdo.
Por su parte, el Consejo Coordinador Empresarial (CCE) consideró que la posición expresada por el presidente de Estados Unidos, de aplicar aranceles a los productos mexicanos, resultaría violatoria del Tratado de Libre Comercio de América del Norte vigente, y de las reglas de la Organización Mundial del Comercio.
“No existe justificación para la posible aplicación de dichos aranceles, que causarían daños a exportadores mexicanos, pero también a consumidores y productores estadounidenses”, indicó la víspera en un comunicado.
Agregó que los asuntos migratorios no deben contaminar y perjudicar la estrecha relación comercial que existe entre ambos países, y que siempre ha sido fuente de enormes beneficios para los trabajadores, consumidores, ciudadanos y empresarios de México y Estados Unidos.