Alonso Ancira, dueño de Altos Hornos de México (AHMSA), ingresará a prisión preventiva en Madrid a la espera de que las autoridades españolas confirmen su extradición a su país, un proceso que podría durar varias semanas, según explicaron fuentes judiciales locales.
Acira, de 67 años de edad, declaró esta mañana desde los juzgados de Palma de Mallorca, ciudad donde fue detenido anoche cuando se disponía a abordar un avión privado con destino a Estados Unidos.
En presencia de su abogado, negó las acusaciones de blanqueo y malversación que pesan en su contra por la presunta venta irregular de una planta fertilizante a Petróleos Mexicanos (Pemex) en 2013, cuando era dirigida por Emilio Lozoya Austin. Esa operación habría ocasionado a Pemex una grave pérdida patrimonial.
El empresario mexicano también es acusado de su presunta vinculación con pagos ilegales de la compañía brasileña Odebrecht al exdirector de Pemex.
El juez de la Audiencia Nacional, Santiago Pedraz, tomó declaración a Ancira por videoconferencia y decretó prisión provisional hasta que se produzca la extradición.
La última palabra la tiene el gobierno español, que reunido en Consejo de Ministros, decidirá sobre la petición de la fiscalía mexicana en un plazo máximo de 40 días.
El siguiente paso en el camino a la extradición de Ancira será una vista en la Audiencia Nacional, en la cual tendrá que declarar si está conforme con su entrega a las autoridades mexicanas. Un formalismo que exige la ley.