Ante la errónea percepción de que México se había convertido en un territorio de fácil tránsito hacia Estados Unidos, se multiplicó el número de extranjeros, más de 300 mil en sólo tres meses, que llegaron a la frontera sur sorprendiendo y desbordando a las autoridades del INM.
Por Ricardo Del Muro
La frontera de Chiapas con Centroamérica se ha convertido en el centro de una tensión ante la descomunal “ola de migrantes” que ha desbordado a las autoridades mexicanas. Aglomeraciones, tumultos, fugas y enfrentamientos, como el registrado el 23 de abril en Pijijiapan, así como los del domingo 12 de mayo en Tapachula y en Tapanatepec, reflejan el colapso de refugios y oficinas del Instituto Nacional de Migración.
En sólo ocho meses, mientras en México se realizaba la transición presidencial, después de las caravanas de migrantes centroamericanos iniciadas en octubre de 2018, se incrementó la llegada de personas a la frontera sur de México en cantidades nunca antes registradas. Más 300 mil migrantes en los primeros tres meses de este año, procedentes ya no sólo de Centroamérica, también de Cuba y Venezuela, Haití e incluso de lejanos países como India, Bangladesh, Pakistán y Afganistán.
En abril, las solicitudes de refugio en el país llegaron a una cifra sin precedente. La situación, particularmente en frontera sur, es casi de colapso, dijo el titular de la Comisión Mexicana de Ayuda a Refugiados (Comar), Andrés Ramírez, entrevistado por un diario nacional, al proyectar la recepción de más de 60 mil solicitudes al cierre de 2019.
Para dimensionar el aumento, basta señalar que durante 2013 el país recibió mil 296 cartas petitorias. Desde entonces, ningún mes había rebasado la franja de los 5 mil expedientes. La suma de enero a abril de este año es de 18 mil 365, equivalente a 62 por ciento de todo 2018.
Ante la errónea percepción de que México se había convertido en un territorio de fácil tránsito hacia Estados Unidos, en unos cuantos meses se multiplicó el número de extranjeros que llegaron a la frontera sur ante la sorpresa de las autoridades del INM, entrampadas en una confusa política del gobierno mexicano que por un lado otorga visas temporales de trabajo y por el otro realiza deportaciones; hace alarde de humanismo y al mismo tiempo encarcela y reprime a extranjeros; al tiempo que enfrenta las presiones estadounidenses y el creciente malestar de los habitantes de las ciudades fronterizas, principalmente Tapachula, ante esta invasión de extranjeros.
Incluso, el presidente Andrés Manuel López Obrador firmó un documento con los mandatarios de El Salvador, Guatemala y Honduras, para construir un Plan de Desarrollo Integral de Centroamérica, propuesta que también se presentó a Canadá y Estados Unidos, pero nada se ha realizado más allá del papel y las declaraciones.
Mientras tanto, se han multiplicado las protestas y los motines de migrantes en varias estaciones del INM, resultando personas heridas, además de cuantiosos destrozos en los inmuebles.
El 23 de abril hubo un disturbio de migrantes en la estación del INM en Pijijiapan y se necesitó la acción de la Policía Federal que detuvo a 371 centroamericanos. En palabras del director del INM, Tonatiuh Guillén: “Son personas que fueron objetos de atención, a todos se les ofreció regular su estancia por medio de la Tarjeta de Visitante Regional. Hubo por un grupo agresiones y por ello se solicitó apoyo de la Policía Federal que terminó en el aseguramiento de 371 personas”.
El incidente de Pijijiapan se divulgó instantáneamente en las redes sociales y fue noticia internacional, por lo que el presidente Andrés Manuel López Obrador, durante su conferencia matutina, negó que haya contradicción en la política migratoria, porque “hemos tratado con mucho respeto a los migrantes”, hasta que hubo este incidente.
Por cuestiones de seguridad “no queremos” que los migrantes tengan libre paso, explicó AMLO, al recordar que en el norte “hemos tenido problemas de asesinatos de migrantes y no queremos eso”. Preferimos atender a esa población en el sur sureste.
Ese mismo día, la secretaria de Gobernación, Olga Sánchez Cordero y el secretario de Relaciones Exteriores, Marcelo Ebrard Casaubón, dieron una conferencia de prensa conjunta, para dar “detalles sobre el tema migratorio en México”.
Sánchez Cordero habló sobre lo que ya era evidente: Han arribado a México en cantidades inusuales, personas migrantes provenientes de otras naciones. “Estamos haciendo –apuntó— todo lo que está en manos del Gobierno Federal para atender a estas personas y brindarles atención humanitaria”.
Lo único -aseveró- que México solicita es que contribuyan con dos elementales conductas: Primero, respetar las leyes mexicanas y a sus autoridades. Y segundo, aceptar su registro como precondición para decidir su calidad migratoria en el país. “Mantener el control de nuestra frontera sur, no es una opción, es una obligación del Estado mexicano. Lo estamos haciendo con orden y apegados a la ley”.
Al día siguiente, viajó urgentemente a Tapachula Alejandro Encinas, subsecretario de Derechos Humanos, Población y Migración, para supervisar el funcionamiento de las estaciones migratorias, principalmente “La Mesoamericana Siglo XXI”, en Tapachula y el albergue de Mapastepec. También se reunió con los presidentes municipales de la zona fronteriza (Mapastepec, Suchiate, Huixtla y Tapachula), a fin de “coordinar acciones con las dependencias federales”.
Pero los conflictos han continuado. El domingo 12 de mayo, por sexta ocasión, se registró una fuga en la Estación Siglo XXI del INM en Tapachula. Migrantes cubanos desesperados ante el burocratismo de la dependencia y temerosos de que ese tortuguismo fuera una trampa para regresarlos a la isla, iniciaban un movimiento de protesta cuando descubrieron que las rejas no tenían candado, por lo que las forzaron para abrirlas y escapar.
En la madrugada de ese mismo día fue provocado un incendio en la estación migratoria de Tapanatepec, ubicada en los límites de Oaxaca y Chiapas, en donde se encontraban retenidos 117 migrantes. Después de que las videograbaciones circularon por la red de Internet, el INM dio a conocer un escueto boletín de prensa donde señalaba: “Se están investigando los detalles de este incendio, que fue provocado por personas que se encontraban dentro de las instalaciones, a fin de deslindar responsabilidades”. No hubo heridos, pero la estación quedó destruida y posteriormente se informó que habían sido detenidos ocho hondureños como presuntos responsables del incendio.
Ese incendio en la estación migratoria de Tapanatepec ha sido el más reciente conflicto de varios que se han registrado en un contexto de migraciones masivas, detenciones y deportaciones de extranjeros que están ocurriendo en la frontera sur de nuestro país. Es previsible, que no será el último, pues todos los días siguen llegando migrantes y las autoridades del INM, desbordadas por el número, muestran su incapacidad para atender a estas personas.
“No tienen idea del problema migratorio que estamos enfrentando en la Secretaría de Gobernación y el Instituto de Migración. Inéditas las cantidades de migrantes que están llegando a nuestro país”, admitió la secretaria de Gobernación, Olga Sánchez Cordero, al ser entrevistada por la prensa, ese mismo domingo, tras participar en la inauguración de la Feria Internacional del Libro en Coahuila.
El número de migrantes que están entrando a México “es enorme”, dijo la secretaria de Gobernación, pero afirmó que esto no representa una crisis migratoria.
La funcionaria explicó que el INM ha deportado a personas que no han querido cumplir con el registro migratorio. “Quienes no se quieran regularizar, quienes no se quieran registrar, pues simplemente los tenemos que devolver. Que quede claro, y tampoco se va a tolerar que violen nuestras leyes y agredan a los agentes migratorios”, advirtió.
Sánchez Cordero también afirmó que la limpieza en el Instituto Nacional de Migración (INM) aún no termina, pues “todavía tenemos varios arroces negros en el arroz blanco”. Detalló que muchos agentes fueron despedidos por vínculos con los tratantes de personas. “Queremos de verdad limpiar en varias estaciones migratorias, hemos ido avanzando lentamente, queremos gente incorruptible dentro del instituto”, ofreció.
El senador Emilio Álvarez Icaza, secretario de la Comisión de Derechos Humanos del Senado de la República no legitimó ni justificó acciones fuera de la ley en torno a la situación migratoria que se suscita en la Frontera Sur, pero señaló que es el reflejo de un contexto que está colapsando. Y advirtió que la tensión y los enfrentamientos con las autoridades mexicanas irán en aumento de no atender con otra lógica esta situación.
LAS CARAVANAS SE DESBORDARON
La historia de este conflicto migratorio comenzó en octubre del año pasado cuando, ante el anuncio de que una multitudinaria caravana de migrantes hondureños habían decidido cruzar el territorio mexicano para llegar a Estados Unidos, el Instituto Nacional de Migración (INM) informó que: “el gobierno de México, en apego a una política migratoria respetuosa de los derechos humanos de los migrantes y del derecho internacional humanitario, reconoce el derecho a la libre movilidad de las personas y el derecho de toda persona a solicitar el reconocimiento de la condición de refugiado”.
En aquella ocasión, el INM reiteró a los integrantes de la “Caminata Migrante”, que partió de San Pedro Sula, Honduras, el pasado 13 de octubre de 2018, que de arribar a los puntos de internación de la frontera sur de México, el personal de migración deberá revisar el cumplimiento de los requisitos que marca la ley, y a quienes no los cumplan, no se les permitirá el ingreso.
En ese contexto, Andrés Manuel López Obrador, como presidente electo, prometió apoyo y protección para los extranjeros que transitaran por México. Incluso dijo que al asumir el cargo como presidente otorgaría visas de trabajo a migrantes.
“Vamos a ofrecer empleo, trabajo, a migrantes centroamericanos; es un plan que tenemos, que el que quiera trabajar en nuestro país va a tener apoyo, va a tener una visa de trabajo. Estamos viendo eso, no atender el asunto solo con deportaciones o con medidas de fuerza, sino dando opciones, alternativas”, explicó.
En tanto, Marcelo Ebrard, ya designado como próximo secretario de Relaciones Exteriores, dijo haberse reunido con representantes de El Salvador, Guatemala y Honduras para acordar una agenda de trabajo en temas como el desarrollo económico y social en cada región, así como la protección, regularización y reintegración de personas migrantes.
De acuerdo con el equipo del gobierno entrante, se instalarían grupos nacionales interdisciplinarios, quienes tendrán la responsabilidad de “identificar y unificar las áreas de oportunidad existentes, así como de diseñar e implementar la estrategia regional de desarrollo entre El Salvador, Guatemala, Honduras y México”.
En el encuentro realizado en Tegucigalpa, Honduras, participó María Dolores Agüero Lara, secretaria de Estado de Relaciones Exteriores y Cooperación Internacional de Honduras; Carlos Castañeda, ministro de Relaciones Exteriores de El Salvador, así como Manuel Estuardo Roldán Barillas, viceministro de Relaciones Exteriores de Guatemala.
Mientras tanto, la Segob, cuyo titular era Alfonso Navarrete Prida, informó que había recibido 640 solicitudes de refugio de migrantes alojados en el punto fronterizo del Suchiate, en Ciudad Hidalgo, y que las autoridades migratorias mexicanas habían dado prioridad a la atención de 164 mujeres, 104 niños, niños y adolescentes, así como adultos mayores.
Sin embargo, ese fin de semana, entre el 19 y el 21 de octubre, más mil migrantes cruzaron la frontera de manera formal: 343 el viernes, 339 el sábado y 346 el domingo.
Para el martes, 23 de octubre, comenzaron a encenderse las luces de alerta, pues se registraron 1,699 solicitudes de refugio, particularmente de niñas, niños y adolescentes, así como de mujeres. De ellos, 1,228 fueron alojados en el Recinto Ferial de Tapachula, para ser atendidos por el Instituto Nacional de Migración (INM) y la Comisión Mexicana de Ayuda a Refugiados (COMAR), mientras 471 permanecieron en la Estación Migratoria Siglo XXI del INM, efectuando diversos trámites migratorios con la debida atención y protección de sus derechos humanos.
Las autoridades alertaron: “Esta cifra de solicitantes de reconocimiento de la condición de refugiado representa un incremento del 65 por ciento con relación al domingo 21 de octubre, cuando se registraron 1,028 solicitudes”. Tres días después, el Presidente Enrique Peña Nieto anunció el Plan “Estás en tu casa” cuyo objetivo principal “es brindarles opciones de trabajo temporal en tanto se resuelve su situación migratoria”.
Sin embargo, los primeros brotes de violencia se registraron el 19 y 28 de octubre, cuando un grupo de migrantes intentaron ingresar a territorio nacional, en el Puente Internacional de Ciudad Hidalgo, rompiendo la reja de entrada y agrediendo con piedras, petardos, botellas de vidrio y cohetones a personal de migración y a la Policía Federal desarmada.
La Segob informó “que dos hombres de nacionalidad hondureña, uno de ellos menor de edad, atacaron con arma de fuego a elementos de la Coordinación de Reacción y Alerta Inmediata de la División de Fuerzas Federales de la Policía Federal (PF), quienes realizaban funciones de prevención en el marco del “Operativo Caminante”, en el poblado de Ignacio Zaragoza, Municipio de Frontera Hidalgo, Chiapas.
El primero de noviembre, las secretarías de Gobernación y de Relaciones Exteriores informaron que, hasta ese día, las personas migrantes, que han solicitado la condición de refugio, suman 2 mil 934, en tanto que 927 personas pidieron “voluntariamente a las autoridades mexicanas el retorno asistido a su país de origen”.
En ese momento, de acuerdo al reporte de Segob, 1,553 personas permanecían alojadas en el albergue del Recinto Ferial de Tapachula, quienes estaban en proceso de recibir su Clave Única de Registro de Población (CURP) Temporal para Extranjeros y serían beneficiarios del Plan “Estás en tu Casa”, lanzado por el gobierno de la República el 26 de octubre.
Para esa fecha, se estimaba que los migrantes centroamericanos que transitaban por el territorio mexicano eran aproximadamente 4,000 personas, quienes habían partido de Juchitán, Oaxaca, hacia el municipio Matías Romero, Oaxaca.
El 6 de noviembre, Segob informó que al concluir los trámites de refugio solicitados por 3, 230 centroamericanos que ingresaron en caravana el pasado 26 de octubre, fue cerrado el albergue temporal en el Recinto Ferial Mesoamericano en Tapachula, Chiapas.
PLAN DE DESARROLLO PARA CENTROAMÉRICA
En el marco de su toma de protesta como presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, el primero de diciembre, firmó un documento con los mandatarios de El Salvador, Guatemala y Honduras, para construir un Plan de Desarrollo Integral que impulsará el desarrollo y las oportunidades de la región, contribuyendo a la prevención del fenómeno migratorio y atacando sus causas estructurales simultáneamente.
El documento, firmado también por los mandatarios de Guatemala, Jimmy Morales Cabrera; y Honduras, Juan Orlando Hernández Alvarado, así como por el vicepresidente de El Salvador, Óscar Samuel Ortiz Ascencio, expresa, entre otras ideas:
“El vínculo y las similitudes entre el sur de México, El Salvador, Guatemala y Honduras, acentuó la necesidad de atender el fenómeno migratorio como una problemática compleja que exige la gobernanza adecuada para facilitar la migración segura, ordenada y regular desde una perspectiva regional integral, y contemple la atención prioritaria a todo el ciclo de la migración (origen, tránsito, destino y retorno) guiada por el principio de responsabilidad compartida pero diferenciada y con pleno respeto y protección de los derechos humanos”.
Como parte de las acciones acordadas, se trabajará en la creación de un fondo, con el objetivo fundamental de implementar el Plan de Desarrollo Integral que incluya programas, proyectos y acciones específicas, a efecto de generar empleos y combatir la pobreza.
Los mandatarios instruyeron a sus respectivas cancillerías, que trabajarán con el apoyo de la Comisión Económica para América Latina y El Caribe (Cepal), a coordinar en el primer trimestre del 2019 la identificación y unificación de las áreas de oportunidad existentes, así como el diseño del Plan de Desarrollo Integral y su implementación futura en armonía con los Objetivos de Desarrollo Sostenible y la Agenda 2030 de las Naciones Unidas, así como con el Pacto Mundial para una Migración Segura, Ordenada y Regular.
Al inaugurar las conferencias mañaneras en Palacio Nacional, el 3 de diciembre, López Obrador informó sobre los tres principales asuntos en la relación de México con Estados Unidos, en donde destacó la negociación del Tratado de Libre Comercio, la migración y la seguridad y el narcotráfico, en ese orden.
Respecto a migración, destacó: “Estamos presentando una propuesta para impulsar el desarrollo en países de Centroamérica, con inversión tripartita: de Canadá, Estados Unidos y de México, para que empresas y gobiernos de los tres países podamos iniciar un plan para impulsar el desarrollo de sur a norte en América Central, y en Norteamérica, para de esa forma enfrentar el fenómeno migratorio, con la idea de que la migración se convierta en optativa, que se vaya a Estados Unidos, o que emigre y que tenga ese derecho el que lo desee, pero que no sea la migración algo relacionado con la falta de oportunidades de trabajo”.
“Estoy planteando la firma de un compromiso entre los tres países para este plan de inversión, y resolver así, con trabajo y bienestar, el fenómeno migratorio”, reiteró AMLO.
Ese día, un reportero de San Diego Red, Gabriel Coronado, preguntó: “Señor Presidente. Específicamente, en Tijuana hay más de siete mil migrantes y hay una gran crisis local y en el estado de Baja California, en el tema migrante ya no se dan abasto, ¿qué se va a hacer al respecto, concretamente con ese tema?”
La respuesta de AMLO: “También se trató en la reunión de hoy (con el Gabinete de Seguridad). Tiende esta situación a normalizarse en la atención que se les está prestando de parte del Gobierno, auxilios en atención médica, en alimentación, hay cocinas del Ejército, de la Secretaría de Marina, de la Secretaría de Seguridad. La Secretaría de Gobernación está atendiendo este asunto. Tenemos ya el reporte del número de migrantes.
“La licenciada Olga Sánchez les va a informar, una vez que terminemos esta conferencia, sobre un registro que se está realizando para saber con exactitud el número y tener los datos básicos para seguir prestando nuestro apoyo, nuestro auxilio, pero sí se está atendiendo este tema. Uno más de este lado…”
En esa primera semana del nuevo gobierno de AMLO, se mencionó de la Tarjeta Humanitaria, con vigencia de un año, que permitiría a los migrantes transitar por el territorio nacional y obtener la Clave Única de Registro de Población (CURP) Temporal para extranjeros, con la que tendrían acceso a servicios públicos, empleo, salud y educación.
El INM informó el 7 de diciembre que había entregado tarjetas de visitante por razones humanitarias a 108 centroamericanos, miembros de la caravana Migrante, albergándolos en el Faro Tláhuac, en la Ciudad de México, lo cual les dará oportunidades de trabajo en el país.
PLÁTICAS CON ESTADOS UNIDOS SOBRE MIGRACIÓN
En la conferencia mañanera del 11 de diciembre, un reportero preguntó: “Presidente, ¿cómo van estas pláticas, estas negociaciones, esta labor de convencimiento con el Presidente de los Estados Unidos, Donald Trump, respecto a todos los migrantes que están en la frontera?”.
López Obrador respondió: “Se está avanzando en la comunicación con el gobierno de Estados Unidos. Tiene esta responsabilidad, este encargo Marcelo Ebrard. Ha tenido ya encuentros con el Jefe del Departamento de Estado, y ya se presentó un texto para la posible firma de un acuerdo de inversión entre empresas y gobiernos de Canadá, de Estados Unidos, México, y de gobiernos centroamericanos, para enfrentar de fondo en lo estructural el fenómeno migratorio. Estamos avanzando en eso. Se está trabajando. Es la diplomacia la encargada de esta tarea.
“Y, también, hoy, precisamente, en el acuerdo del Gabinete de Seguridad se nos informó sobre la situación de los migrantes en Tijuana: cómo están siendo atendidos por nuestro gobierno; cómo se les está garantizando alimentación, atención médica, protección, trato humanitario”.
El tema de ese día fue el Programa Misión Paisano, que presentó el presidente López Obrador “con el objetivo de garantizar que los paisanos que regresan a México con motivo de las festividades de fin de año no sean objeto de actos de corrupción por parte de servidores públicos y, en cambio, reciban atención y acompañamiento fraternales en un marco de seguridad”.
Para el 13 de diciembre, en su conferencia mañanera, el presidente López Obrador informó que había sostenido una conversación telefónica con su homólogo de Estados Unidos, Donald Trump, en la que se habló del acuerdo de cooperación para atender el fenómeno migratorio y anunció para el mismo México dispone de 5 mil millones de dólares.
“Fue muy buena la conversación, amistosa, respetuosa. Hablamos del tema migratorio y de la posibilidad de lograr un acuerdo de inversión para apoyar proyectos productivos, crear empleos en los países de Centroamérica y en nuestro país, con la idea de que no tenga la gente la necesidad de migrar, que la migración sea optativa, no obligatoria.
“Le mencioné que nosotros disponemos para este plan -y ya está contemplado en el presupuesto que se va a entrega el sábado-, de cinco mil millones de dólares y se acordó mantener las pláticas”, afirmó.
“Ellos van a revisar la propuesta para ver si es posible que se pueda suscribir un acuerdo de inversión, un acuerdo conjunto de inversión para actividades productivas y creación de empleos. Sobre eso hablamos en muy buenos términos con el presidente Trump”.
El 24 de diciembre, después de su mensaje navideño, López Obrador afirmó que el gobierno de México mantiene su interés en conservar buena relación con Estados Unidos en un marco de respeto a la soberanía y brindará la protección más amplia a los derechos humanos de las personas migrantes que se encuentran en territorio nacional.
Por su parte, el secretario de Relaciones Exteriores de México, Marcelo Ebrard Casaubón, dio lectura a un comunicado emitido en conjunto con la Secretaría de Gobernación donde se establece una postura respecto a la Sección 235 (b) (2) (c) de la Ley de Inmigración y Nacionalidad de Estados Unidos.
En primer término, señaló que la aplicación de dicha sección “en el sentido que fue notificada al Gobierno de México, es un asunto interno de ese país. El Gobierno de México tomará las medidas pertinentes en ejercicio pleno de nuestra soberanía y en apego a nuestro marco jurídico al respecto”.
Por ello, dio a conocer que solicitará al gobierno de Estados Unidos “mayor información sobre su propuesta de retorno a México de personas [que cuentan] con un citatorio para comparecer en una corte migratoria de los Estados Unidos de una manera ordenada y segura”, y agregó que “este diálogo, y en todo caso, sus alcances, deberán sujetarse al marco internacional y a la legislación de cada país”.
En segundo lugar, el canciller mexicano indicó que “México no ha aceptado en ninguna condición, ni de jure ni de facto, el estatus de tercer país seguro para el trato a las personas que ingresan a nuestro territorio buscando acceder al de los Estados Unidos de América.”
Explicó que un acuerdo de tercer país es un compromiso internacional con carácter vinculante suscrito por medio de un tratado bilateral. En ese sentido, aclaró que “México no acepta ni aceptará firmar un tratado que lo ponga en esa circunstancia”.
Por último, dio a conocer que tanto la cancillería como la Secretaría de Gobernación “van a privilegiar, y seguirán haciéndolo, la protección más amplia de los derechos humanos de las personas migrantes que se encuentran en nuestro territorio, así como la ayuda humanitaria que requieren para salvaguardar su integridad personal o familiar”.
En conclusión, Ebrard Casaubón afirmó que “la política migratoria mexicana está cambiando drásticamente” y que la instrucción del presidente López Obrador es “que sea la dimensión humana” el eje regulador, lo cual significa que “no permitamos el abuso a los derechos de las personas; que sí se tenga regulación, pero humanitaria, que esa política sea timbre de orgullo para México y referente en todo el mundo”.
NUEVA POLÍTICA MIGRATORIA
Olga Sánchez Cordero, secretaria de Gobernación, en esa ocasión (24 de diciembre) reiteró que es instrucción del Ejecutivo dar un giro radical a la política migratoria, misma que ya se encuentra armonizada con la Convención de Marrakesh, instrumento recientemente aprobado por la ONU y suscrito por México.
En estos términos, Sánchez Cordero afirmó que la nueva política migratoria consiste en que “la entrada a nuestro país va a ser ordenada, segura y regulada; es decir, no más violaciones, ni vejaciones, ni humillaciones a los migrantes, ni tampoco tienen por qué pasar en forma ilegal, sino ordenada, pacífica y regulada, con respeto irrestricto a sus derechos humanos” y en apego a la legislación vigente en la materia.
Sin embargo, el viernes 15 de marzo hubo una pelea entre hondureños y cubanos, que disputaban el ingreso a las oficinas del INM en Tapachula, resultando gravemente herido un agente de migración.
En respuesta, el INM informó la suspensión de los servicios de su delegación en Tapachula. Precisó que se atenderán únicamente los servicios que ya hayan sido ingresados en la delegación local de Ciudad Hidalgo, como el seguimiento y resolución a los trámites de regularización de situación migratoria por razones humanitarias.
“Ante los hechos ocurridos el pasado viernes 15 de marzo en la delegación del @INAMI_mx en #Chiapas, se informa la suspensión de labores hasta nuevo aviso”, indicó el organismo en la red social de Twitter.
El mismo día que se registró el motín de los cubanos, la secretaria de Gobernación, Olga Sánchez Cordero, anunció que se renovaría todo el personal del INM por ser una de las dependencias que estaban más penetradas de corrupción.
Explicó que hasta ese momento se habían presentado tres o cuatro denuncias penales en contra de agentes migratorios por extorsión a indocumentados.
Durante la conferencia de prensa del presidente López Obrador, la funcionaria federal indicó que investigan casos de extorsión a centroamericanos en Tamaulipas, hasta por 3 mil dólares, para presentar las querellas correspondientes.
Dijo que la limpia en el INM se realiza sobre todo en puertos de entrada de migrantes, desde luego Cancún, “donde estamos renovando prácticamente todo el personal, Chetumal y Ciudad de México. Vamos a continuar con Guadalajara, el norte (del país). Explicó que el instituto es enorme y el propósito es firme para poder ir renovando a todo el personal”.
Sánchez Cordero explicó que el proceso de renovación del INM, a cargo de Tonatiuh Guillén, “está en marcha, pero sin duda lleva tiempo porque era tanta la corrupción y son tantos los agentes y el personal que estamos renovando, que todavía vamos a tardar un poquito más… Vamos a ir limpiando el instituto, no lo podemos hacer de la noche a la mañana”.
El 19 de marzo, el Comisionado del Instituto Nacional de Migración (INM), Tonatiuh Guillén López, participó en la reunión de trabajo de las comisiones de Asuntos Frontera Norte y Frontera Sur de la Cámara de Diputados con el propósito de compartir con los legisladores las bases de la nueva política migratoria del Gobierno de México.
En la reunión, en la que estuvieron los presidentes de ambas comisiones, Rubén Moreira Valdez de la Norte y Raúl Eduardo Bonifaz Moedano de la Sur, el titular del INAMI comentó que están diseñando parámetros que den como resultado programas sexenales de gobierno. “Se está construyendo un nuevo paradigma que basa la política migratoria en dos principios: el respeto irrestricto a los derechos humanos y el desarrollo social y económico como base de las dinámicas migratorias”, agregó.
Asimismo, anunció que como parte de las acciones a emprender de esta nueva política migratoria, se buscará regular a los extranjeros que han decidido quedarse a vivir en territorio nacional. México, informó, es el país con menos migración internacional; no obstante, nos daremos a la tarea de regularizar este hecho para tener mayor certeza e información real.
Mientras tanto, el 17 de abril, el INM abrió en las instalaciones de la Expo Feria Tapachula, un albergue temporal para brindar servicios a personas migrantes. En este espacio se proyectaba atender a familias completas, la mayoría mujeres y menores de edad.
El área tendrá una capacidad para albergar a alrededor de mil 500 personas, se puntualizó. Cuenta con varios servicios, entre ellos, sanitarios, regaderas, lavaderos, espacios para pernoctar, área de servicios de salud y lugares para actividades recreativas de niñas, niños y adolescentes.
Hasta ese momento, se registró la atención a una población de 573 personas (125 mujeres, 329 hombres y 119 menores de edad). “Las personas migrantes deberán permanecer en el albergue hasta en tanto se resuelve su estancia regular en México. En los casos que proceda, para nacionales de países vecinos, se emitirá la Tarjeta de Visitante Regional, que posibilita entradas y salidas múltiples del país, con posibilidad de movilidad solamente en los estados del sur”, explicó el INM.
Sobre las personas migrantes que se encuentran en el país, el INM presentó un informe el 19 de abril:
Primero, en el albergue temporal de Ciudad Hidalgo, “Puente Rodolfo Robles”, se atienden a mil 100 personas. En este sitio se les brinda atención médica, agua y pañales, así como 3 mil 300 raciones diarias de comida.
Segundo, en el albergue para migrantes, instalado en la Feria Mesoamericana, se encuentran mil 527 personas en espera para ser retornadas a su país.
Tercero, el INM precisa que en la Estación Migratoria Siglo XXI ya no existen personas al exterior, como sucedió en días pasados.
Cuarto, en el albergue en Mapastepec continúa la ayuda humanitaria a 650 personas migrantes que decidieron permanecer en el lugar, en espera de obtener una condición de estancia regular en México.
Quinto, el Grupo Beta proporciona ayuda y brinda apoyo a contingentes de personas migrantes que están en Mapastepec y Escuintla.
La atención se otorga en coordinación con diferentes instancias del gobierno del estado.
Adicionalmente, con el apoyo del municipio de Tapachula se abrirá un nuevo albergue migratorio en el Centro de Convivencia, con capacidad para 500 personas.
DISTURBIOS Y ENFRENTAMIENTOS
El 23 de abril se registró el disturbio de migrantes en la estación del INM en Pijijiapan, en donde la Policía Federal a 371 centroamericanos. El 25 de abril, al interior de la Estación Migratoria Siglo XXI, en Tapachula, hubo una fuga de 645 cubanos. El 28 de abril, 14 cubanos y dos salvadoreños huyeron de la estación migratoria de Comitán.
En este contexto de disturbios y fugas en las estaciones del INM, se realizó la conferencia de prensa conjunta de los secretarios de Gobernación y Relaciones Exteriores, Olga Sánchez Cordero y Marcelo Ebrard, el 23 de abril, en donde se aclaró que la visión del Gobierno de México respecto de la migración, tiene tres ejes fundamentales: la protección de los derechos humanos, el desarrollo económico y social de los países de la región centroamericana y el registro ordenado de los migrantes que ingresen a territorio nacional, como precondición para que el gobierno pueda proteger sus derechos humanos.
Sánchez Cordero subrayó que ha crecido también de manera inédita la proporción de mujeres y de menores de edad. Asimismo, han arribado a México en cantidades inusuales, personas migrantes provenientes de otras naciones. “Estamos haciendo –apuntó— todo lo que está en manos del Gobierno Federal para atender a estas personas y brindarles atención humanitaria”.
En tanto, el comisionado del INM, Tonatiuh Guillén López, evidenció la necesidad de realizar procedimientos que permitan certidumbre, seguridad y que el Estado tenga conocimiento de quien y de qué manera transitan por territorio mexicano. Respecto a la tarjeta que se otorga a personas migrantes abundó que no se trata de visas de tránsito.
Explicó que actualmente se está avanzando hacia una modalidad más selectiva de dicha tarjeta, pero no desaparecerla, ya que es un recurso importante de protección humanitaria y un recurso de inclusión en México.
El INM informó que el 6 de mayo se reanudaron los servicios en la oficina de regulación migratoria de Tapachula, que había sido temporalmente cerrada “debido a las reparaciones necesarias, causadas por el incidente del 15 de marzo del año en curso”.
Ese mismo día “se presentó un número importante de personas extranjeras (456) para solicitar algún trámite migratorio, en su mayoría de nacionalidad cubana”.
Ante las escenas de enojo de los migrantes cubanos, difundidas en redes y en las televisoras de todo el mundo, las autoridades del INM se vieron en la necesidad de aclarar “que el ingreso a México para los cubanos es mediante la visa correspondiente, que se gestiona en el Consulado de México en la ciudad de La Habana”.
Las personas originarias de Cuba que están en Tapachula y que solicitan su regularización en el país, no tienen la posibilidad formal de cubrir los requisitos que establece la legislación de migración mexicana para obtener una Tarjeta de Visitante por Razones Humanitarias, salvo que se justifique el carácter humanitario.
Mientras tanto, en su primera semana, ésta oficina del INM en Tapachula atendió a mil 778 migrantes. Se iniciaron 582 trámites, en su mayoría regularización por razones humanitarias; se expidieron 230 documentos migratorios y se brindaron mil 196 asesorías personalizadas. Y los migrantes, procedentes de una variedad de países, siguen llegando a nuestra frontera sur.