El Museo del Louvre de París, no abrió sus puertas este lunes por la mañana debido a un movimiento de protesta de empleados que denuncian problemas de personal ante la creciente afluencia de visitantes.
“El Louvre se asfixia” y “el personal constata una degradación sin precedentes de las condiciones de visita y de trabajo”, denunció el sindicato Sud Culture Solidaires.
“En 2018, la frecuentación del Louvre superó el listón de los 10.2 millones de visitantes. Mientras el público aumentó más del 20 por ciento desde 2009, el palacio no se agrandó y los efectivos no cesaron de reducirse”, afirma el sindicato.
“Reunidos en asamblea general este lunes, los empleados decidieron ejercer su derecho de retirada y dirigirse a la dirección del museo para expresar su ira”, agregó el sindicato.