El secretario de Relaciones Exteriores de México, Marcelo Ebrard Casaubón, presentó al Departamento de Estado de Estados Unidos el Plan de Desarrollo para Centroamérica de la CEPAL que, según el canciller, sería como tratar de integrar a los países del denominado Triángulo Norte a la “región económica norteamericana”.
Ebrard llegó a Washington con la intención de presentar el “Plan de Desarrollo Integral: El Salvador, Guatemala, Honduras, México” para impulsar el crecimiento y desarrollo social de la región de la CEPAL al secretario de Estado de EU, Mike Pompeo. Sin embargo, fue recibido por el número dos del Departamento de Estado, John Sullivan; Pompeo se disculpó por tener que acudir a la Casa Blanca.
El canciller mexicano presentó “en esencia” la estrategia, y entregó una “versión sintetizada” del proyecto. “Lo recibió con interés”, comentó Ebrard, convencido de que el mensaje “va a ser escuchado”.
«No puedo decirles si EU va a tomar todos los procesos que presentamos, pero seguramente que sí, el punto de vista de México, hay que ponerlo en la ecuación”, dijo.
La hoja de ruta, “muy clara y con proyectos específicos”, tendría como objetivo que Guatemala, Honduras y El Salvador “formen parte de la región económica norteamericana, el mercado más grande del mundo”. La idea, según Ebrard, no sale de la nada. México tiene tratados de libre comercio con todos ellos. “No estamos planteando algo distinto”, señaló. “Pensamos que está al alcance de la mano”, añadió.
Para ello, el canciller urgió a “tomar decisiones y hacer inversiones en el corto plazo”, algo necesario para encontrar una solución a la situación actual en esos países que repercute en toda la región norteamericana.
Esas inversiones, en proyectos como la conexión energética o un proyecto educativo encabezado por Unicef, serán la “respuesta efectiva” que se requiere para solucionar una crisis que está “creciendo muchísimo”, con un flujo migratorio cada vez más elevado hacia el norte por las pocas posibilidades en esos países.
“Ahora lo que tenemos es un asunto común: los tres países de Centroamérica que debemos apoyar para que la gente tenga alternativas, es lo que queremos poner sobre la mesa. Y pensamos por la recepción que tuvimos ahorita que ese mensaje va a ser escuchado”, resumió.
Por otra parte, Ebrard deseó que la inversión de EU sea mayor a los 10 mil millones de dólares que se acordaron a finales de marzo con Jared Kushner, yerno y asesor principal del presidente Donald Trump, para inversiones para el desarrollo en México y Centroamérica.
“Nosotros buscaríamos una cifra mayor a 10 mil millones de dólares, pero no la digo ahorita porque capaz que voy a aumentar la resistencias”, esquivó el canciller.
Ebrard se quedará la mañana de este viernes en Washington, donde tiene programado presentar el proyecto a Kushner y al secretario de Seguridad Nacional, Kevin McAleenan, en la Casa Blanca. El canciller confesó no saber en qué quedó la promesa de inversión, y espera sacar respuestas de ese encuentro, especialmente en la contribución que EU puede hacer al plan.
La gira para presentar el proyecto no se detendrá en Washington; Ebrard estará el próximo 28 de mayo en Berlín para ponerlo a consideración de los países europeos.
Cuestionado por los constantes ataques de presidente Trump hacia México, el canciller restó importancia al asunto y se mostró seguró que la realidad “estratégica económica inmensa” va a provocar que “tengamos una buena relación, o cada vez mejor relación entre ambos países”.