El presidente Andrés Manuel López Obrador aceptó firmar un acuerdo para la concordia nacional y pidió que también se incluya a la clase empresarial y sindical del país, informó el presidente de la Conferencia Nacional de los Gobernadores (Conago), Francisco Domínguez.
Durante la reunión privada en las oficinas de Palacio Nacional, el primer mandatario pidió al también gobernador de Querétaro que se coordine con, Alfonso Romo para que los representes del Consejo Mexicano de Negocios, el Consejo Coordinador Empresarial, y las tres agrupaciones sindicales más grandes: la Organización Internacional del Trabajo, Confederación de Trabajadores de México y el Comité Ejecutivo Nacional de la Confederación Autónoma de Trabajadores y Empleados de México.
“Voy a ponerme a trabajar, por indicaciones del presidente, con el jefe de la Oficina, Alfonso Romo; voy a buscar al líder de los hombres de negocios, al presidente del Consejo Coordinador Empresarial, a los sindicatos y a otros grupos porque acepta que lancemos; no sabemos el nombre todavía, un acuerdo para la concordia entre todos los actores políticos, la jefa de gobierno, los gobernadores, el Gobierno de la República, pero me pide sumar a la clase patronal, a la clase trabajadora y a lo mejor, a algún otro grupo que deba incluirse”, adelantó a su salida.
En dicho documento se comprometerán todos los actores políticos a impulsar cuatro ejes estratégicos, para alcanzar el bienestar nacional, los cuales son muy similares a los que pactó con el presidente del CCE, Carlos Salazar Lomelín, en su toma de protesta.
En primer lugar, luchar contra la corrupción; en segundo, ayudar para alcanzar el crecimiento económico al cuatro por ciento; en tercero, pacificar al país; y en cuarto, acabar con la pobreza en México.
Descartó que el acuerdo sea suscrito por los líderes nacionales de los partidos políticos, porque ya están representados por los gobernadores en las distintas entidades.
“Vamos a trabajar, no descarto a nadie. En este momento no lo estamos visualizando porque habemos gobernadores emanados de todas las fuerzas políticas, entonces, estamos representados todos. Están los gobernadores del PAN, del PRI, MC, independientes”, explicó.
Por otro lado, comentó que López Obrador les propuso que en cada entidad se lleve a cabo una obra de infraestructura de alto impacto, las cuales serán financiadas con recursos federales, similar a los trenes y la presa que presentó la semana pasada en Monterrey, Nuevo León.
Francisco Domínguez le pidió al titular del Ejecutivo Federal que se equilibre la entrega de programas sociales con la distribución de los recursos federales, para inversiones públicas y así impulsar el desarrollo en el sur-sureste.
Asimismo, resaltó que se deben continuar los apoyos a los estados del centro y norte del país, donde se concentra la generación de empleos.
“Que esos 80, con estrategias, se destinen a equilibrar al sur-sureste y que se equilibren; que empiece a crecer económicamente, a generar empleos, porque con los programas sociales el gobierno de la República ayuda, pero no hay mejor fórmula de abatir la pobreza y de generar paz que generar empleos y empresarios”, demandó.
