Alejandro Encinas Rodríguez, subsecretario de Derechos Humanos, afirmó que el reportero Francisco Romero Díaz -quien ayer jueves fue asesinado en Quintana Roo- incumplió con las medidas del mecanismo de protección a periodistas que el Gobierno federal le había otorgado, debido a que salió de su casa sin avisar a sus escoltas, además de que se le ofreció un domicilio en la Ciudad de México, al cual decidió dejar a un lado y regresar a vivir a Playa del Carmen.
En conferencia de prensa en Palacio Nacional, el subsecretario afirmó que se le está brindando todo el apoyo a la familia del comunicador.
«Él estaba incorporado desde julio del 2018 en el Mecanismo de Protección con la mayor parte de las acciones que se otorgan de protección, donde incluso se estableció un domicilio para que radicara en la Ciudad de México, el cual él decidió dejar a un lado y regresar a vivir a Playa del Carmen. Por supuesto que estamos haciendo la investigación del caso asociada a la que se ha abierto por parte de la Fiscalía del estado, tomando en consideración particularmente la declaración de su esposa, que señala que efectivamente el mecanismo había venido cumpliendo con su responsabilidad y el personal de escolta lo estuvo acompañando hasta su casa ese día donde pernoctó, y lamentablemente él salió sin haber dado aviso a nadie y sucedió este percance».
Señaló que se revisará la implementación de las medidas que se otorgan para la protección de comunicadores, pero «sí tenemos que pedirles a los beneficiarios de este programa que nos ayuden a cumplir con los parámetros de seguridad que se requieren para evitar este tipo de incidentes».
El reportero Francisco Romero Díaz, director del portal «Ocurrió Aquí» y ex colaborador del semanario «Playa News» y de «Quintana Roo Hoy», fue ultimado ayer jueves en Playa del Carmen, municipio de Solidaridad.