El departamento de Estado de Estados Unidos ordenó este miércoles a todo el personal no imprescindible que abandone la embajada en Bagdad y el consulado en Erbil en un contexto de tensión creciente entre Washington e Irán, vecino de Irak.
Estados Unidos ha incrementado la presión sobre Irán en los últimos días, acusándole de planear ataques «inminentes» en la región y reforzando su presencia militar en el Golfo.
«Numerosos grupos terroristas e insurgentes están activos en Irak y atacan regularmente tanto a las fuerzas de seguridad iraquíes como a los civiles», escribió en una advertencia para los viajeros.
«Las milicias sectarias antiestadounidenses también pueden amenazar a ciudadanos estadounidenses y compañías occidentales en todo Irak», añade el texto.