La Secretaría de Salud aseguró que se atenderán todos los casos en los que se reporte falta de medicamentos antirretrovirales como tratamiento contra el VIH ante las denuncias de escasez hechas por organizaciones sociales.
En un comunicado, la secretaría aseguró que si se dieran circunstancias específicas de imposibilidad de acceso a los mismos, el tratamiento será sustituido por otro de «igual o mayor barra genética».
«La instrucción es no suspender el tratamiento a ninguna de las 97 mil personas que reciben medicamentos para controlar la infección por VIH», corroboraron desde el departamento dirigido por Jorge Alcocer.
En este sentido, la Secretaría de Salud informó que temporalmente cuenta con alternativas «emergentes de abasto mediante compras por adjudicación directa, licitación pública internacional abierta, así como el apoyo de otras instituciones públicas de salud».
Y todo esto, «en coordinación con todos los Estados para casos particulares».
«Es claro que el compromiso no es solo comprar y distribuir medicamentos, sino revisar en profundidad los tratamientos», indicaron las autoridades competentes.
Organizaciones de afectados por el VIH denunciaron escasez de medicamentos en centros sanitarios de todo el país, sobre todo en los estados de Tamaulipas, Chihuahua y Campeche.
Pacientes de VIH también piden destitución de directora de Clínica Especializada Condesa
Por eso, el pasado jueves, decenas de personas vestidas mayoritariamente de blanco bloquearon Paseo de la Reforma de Ciudad de México para solicitar al Gobierno que asegure su acceso al tratamiento.
Esta situación ocurre tras el establecimiento de un nuevo mecanismo de compra de medicamentos por parte del Gobierno liderado por Andrés Manuel López Obrador desde el pasado 1 de diciembre.
Anteriormente, era el Centro Nacional para la Prevención y Control del VIH/SIDA (Censida) el que se encargaba de la compra de medicamentos.
Sin embargo, el líder izquierdista decidió suprimir los intermediarios en la entrega de recursos para así erradicar la corrupción, lo que habría derivado en retrasos en la compra de los medicamentos.