Donald Trump, su familia y su grupo empresarial demandaron el lunes al Deutsche Bank y al banco estadounidense Capital One para impedir que respondan a una citación del Congreso de Estados Unidos, que examina las finanzas del presidente, entre ellas sus estados de cuenta, en el marco de una investigación legislativa sobre una presunta colusión con Rusia en la campaña electoral de 2016.
El Congreso, con mayoría demócrata, envió citaciones a varios bancos, que la demanda de la familia Trump calificó de “intrusivas”, “excesivas” y “sin base jurídica”.
“Las citaciones fueron emitidas para acosar al presidente Donald J. Trump, para indagar en todos los aspectos de sus finanzas personales, de sus empresas así como en los asuntos privados del presidente y su familia, y para intentar sacar cualquier elemento susceptible de perjudicarle políticamente”, según la demanda, interpuesta en un tribunal federal de Nueva York.
“Nada permite establecer otra motivación que no sea política” para estas citaciones, añade el texto.
Según la denuncia, el Congreso sobrepasa sus atribuciones legislativas para inmiscuirse en el terreno judicial y violar el derecho a la vida privada de Trump y su familia.
Deutsche Bank es uno de los pocos grandes bancos occidentales que siguió prestándole dinero al grupo de Trump tras la quiebra de varios de sus casinos en los años 1990, generando deudas que se estiman actualmente en 330 millones de dólares.
Esa decisión convirtió al banco en objeto de numerosas investigaciones en Estados Unidos.
La semana pasada, una fuente conocedora del caso indicó que el banco alemán comenzó a entregar documentos solicitados por la justicia neoyorquina.
“Seguimos determinados a cooperar con las investigaciones autorizadas”, comentó el banco alemán.
En enero, los congresistas demócratas, que ostentan la mayoría en la Cámara de Representantes, pidieron información a la entidad sobre las tasas de interés concedidas a la organización de Trump.
Pero los Trump desean bloquear que se divulgue esa información, y en la demanda piden “prohibir en forma permanente” al Deutsche Bank y a Capital One la revelación o envío de cualquier información solicitada.
También argumentan que el Congreso busca información sobre “hechos que ocurrieron mientras el presidente Trump era un ciudadano privado, años antes de que siquiera fuera candidato”.