Más de 200 personas, entre ellas 35 extranjeros, murieron y centenas resultaron heridas este domingo en atentados contra tres iglesias que celebraban la misa de Pascua y cuatro hoteles de lujo en Sri Lanka.
El gobierno ordenó un toque de queda de duración indeterminada que entró en vigor este domingo y el bloque temporario de las redes sociales.
Por la mañana, en Colombo, se produjeron ataques en tres hoteles de lujo y en una iglesia que causaron al menos 64 muertos, según una fuente policial.
Por la tarde, al menos dos personas murieron en una nueva explosión en un cuarto hotel, situado en Dehiwala, en la periferia sur de la capital. En Orugodawatta, al norte de Colombo, un kamikaze se inmoló en un edificio y mató a tres policías, según la policía.
En Negombo, al norte de la capital, 67 personas perdieron la vida en una iglesia y otras 25, en una iglesia de Batticaloa, en el este de la isla.