Al conmemorarse la Hora del Planeta este sábado, la famosa ópera de Sidney y el puente de la bahía de la ciudad australiana apagaron sus luces como una forma de crear conciencia sobre el cambio climático y su impacto en la biodiversidad.
Este año, la conmemoración cobra especial atención tras la publicación de informes mundiales con la advertencia urgente sobre el estado del hábitat natural y las especies de la Tierra.
En su décimo tercera edición, la Hora del Planeta, organizada por el Fondo Mundial para la Naturaleza (WWF, por sus siglas en inglés), verá a millones de personas en 180 países apagar sus luces a las 20:30, tiempo local, para reflejar el impacto que tiene el gasto energético sobre el cambio climático y su papel clave en la naturaleza.
Numerosos monumentos y edificios emblemáticos de todo el mundo quedarán a oscuras entre las 20:30 y las 21:30 horas, tiempo local, como la Torre de Shanghái, el Puerto Victoria de Hong Kong, la plaza Roja de Moscú, la Acrópolis de Atenas, la Torre Eiffel de París, las pirámides de Egipto, la basílica de San Pedro en Roma, el Big Ben de Londres, el Corcovado de Río y la sede de la ONU en Nueva York.