Punto de Vista
Por Jesús Michel Narváez
Desde hace meses, la coalición que mantiene el poder en Israel y conserva a Benjamin Netanyahu, recibe severas críticas de sus “aliados” y de ONGs humanitarias. Incluso la ONU ha exigido libertad para la entrega de alimentos en Gaza, una zona destruida por la venganza cobrada al secuestro de cerca de 200 israelís en un operativo de Hamás que tomó dormidos a los elementos del Mossad “dormidos” aquel lejano y no tanto 12 de octubre de 2023.
La respuesta de Israel ha sido devastadora. Sin ganar la guerra contra Palestina, alarga el sufrimiento de los gazatíes que, ahora por orden del secretario de finanzas del gabinete de Netanyahu, Bezalel Smotrich, recibirán “un pan de pita y un plato de comida” al día.
¿Cuál es la diferencia entre los nazis que cometieron el genocidio de judíos en Auschwitz?
El espíritu exterminador del ultraderechista Smotrich se estimaba había desaparecido al final de la segunda guerra mundial por la condena universal de las atrocidades cometidas por el ejército del que exigió se le reconociera con el salid ¡Heil, mein Führer!
El mundo se ha equivocado.
Los campos de exterminio de la Alemania nazi están reproducidos ahora en Gaza. Son campamentos de la muerte. La falta de comida, las enfermedades, la carencia de higiene se combinan para emprender el camino que conduce inexorablemente a dejar de vivir.
Desde el inicio de la respuesta militar de Israel, las fronteras fueron cerradas y los silos de alimentos destruidos al igual que los hospitales, los centros comunitarios y los edificios de oficinas gubernamentales y habitacionales. La ONU recopió acomida, agua y medicamentos para alimentar y atender a heridos. El vital líquido quedó, junto el resto de apoyo humanitario, detenido en la frontera con Egipto. Centenares de camiones cargados esperaron sin obtener el paso libre que debería ordenar Israel.
El ultimátum dado a conocer ayer por el presidente Emmanuel Macron y los primeros ministros del Reino Unido, Keir Starmer y de Canadá Mark Carney y en el que exigen se abran las puertas para el ingreso de alimentos, no fue recibido de buena manera en Tel Aviv.
Por el contrario, como afirmó el ministro de finanzas -seguro le corre por las venas sangre aria- sin el “dejar hacer, pero con límites” -interpretación personal- de los aliados. Israel habría terminado la guerra en un dos por tres.
La llamada de Francia, Inglaterra y Canadá podría representar la fractura mayor entre los aliados de Israel encabezados por Estados Unidos. De concretarse medidas extremas por parte de los tres países, es seguro que la Unión Europea se sumaría y probablemente hasta Washington se haría un lado hasta que Netanyahu y su gobierno total dimita y comienza una nueva era para los palestinos.
Preocupante que Donald Trump mantenga el ojo puesto en Gaza “que está totalmente destruida” y será imposible reconstruirla por loque, propone y busca la oportunidad de erigir una zona turística para ricos.
En las guerras, desplazamiento de unos, los agredidos, se multiplica y el genocidio continúa hasta el exterminio.
¿Qué ganará Israel con borrar de la faz de la tierra a los que ocuparon las tierras por el destierro de los judíos?
Recuperar el pasado para hacer vivir a los “invasores” lo que vivieron los judíos errantes, no les dará lo que les ordenaron abandonar.
Lo que ocurre en esa desigual guerra, lleva a suponer la existencia de judíos-nazi o nazi-judíos, aunque se enojen quienes encajen en la comparación.
Trump prometió la paz en la guerra de Rusia-Ucrania. Trump promedio el final de la guerra Israel-Palestina.
Parece ser militante de Morena. ¿O no?
E-mail: jesusmichelmp@hotmail.com, Facebook Jesús Michel, X @misionpolitica y en Misión, Periodismo sin Regaños martes y jueves de 16 a 17 horas por Radio Cañón en el 760 de amplitud modulada.
