
Donald Trump, llegó al funeral del papa Francisco, con quien había tenido diferencias sobre inmigración, clima y otros temas.
Al mandatario estadounidense lo acompañó su esposa, Melania. Juntos realizaron una guardia frente al féretro de Francisco, escoltado por guardias suizos.
Tras conocer la muerte del papa y a pesar de las diferencias, Donald Trump ordenó que las banderas estadounidenses ondearan a media asta, como muestra de respeto.
La presencia de Donald Trump en el funeral del papa Francisco llama la atención debido a que día antes de morir, en su último discurso público, el papa Francisco transmitió un mensaje de unidad en el Domingo de Pascua e hizo un llamado a favor de los marginados y los migrantes. “Todos nosotros”, proclamó, “somos hijos de Dios”.
En un mensaje radicalmente diferente, Donald Trump publicó ese mismo día un post lleno de insultos en el que deseaba una feliz Pascua a sus adversarios, incluidos
“Lunáticos de la izquierda radical”, “jueces y funcionarios policiales DÉBILES e INEFICACES”, y al expresidente Joe Biden, “nuestro PEOR y más incompetente presidente”.
Diferencias fundamentales entre el papa Francisco y Trump
Algunas de las diferencias fundamentales entre el presidente de Estados Unidos y el difunto pontífice, no solo sus estilos divergentes, sino también sus posturas sobre migración, medio ambiente y pobreza se harán más evidentes cuando Trump viaje a Roma el viernes para el funeral de Francisco, que se celebrará el sábado por la mañana en la Plaza de San Pedro.
La relación no era buena entre Trump y el jesuita argentino durante el primer mandato del republicano, de 2017 a 2021.
El pontífice y el presidente se enfrentaron desde el principio por la inmigración. En 2016, aludiendo al entonces candidato Trump, Francisco calificó de “no cristiano” a cualquiera que construya un muro para impedir la entrada de migrantes. El republicano dijo que el comentario era “vergonzoso”.
A pesar de las diferencias entre la multimillonaria exestrella de la telerrealidad y Francisco, conocido por su estilo humilde, a lo largo de los años, el apoyo de los católicos estadounidenses a Trump ha aumentado de forma gradual. Los cortejó en su última campaña presidencial, y entre sus seguidores hay muchos obispos influyentes. Agencias