Por Itzel Toledo García
En los últimos meses se ha podido visibilizar en Estados Unidos una importante falta de conductores de camiones de carga. Según la Asociación Camionera Estadounidense en ese país hacen falta 80,000 transportistas. Como consecuencia, las cadenas de suministro se han retrasado mientras ha aumentado la demanda de productos durante los últimos meses debido a la pandemia por Covid-19. Es decir, los puertos no han podido funcionar fluidamente pues hay mercancía que tarda mucho en salir y esto lleva a embotellamientos, por lo tanto se han visto estantes vacíos en tiendas y las compras en línea no han llegado a tiempo a los consumidores.
Mientras muchos transportistas se jubilan son pocas las personas jóvenes que deciden realizar este trabajo, pues se trata de un empleo mal pagado por largas jornadas, que implican pasar poco tiempo en casa y tener poca convivencia social. Además, al pasar muchas horas manejando a lo largo del día después de varios años los transportistas sufren problemas en la espalda y afectaciones en el sueño. Esta situación ha llevado a un aumento en el salario de conductores por un 20%, pero esto no ha resuelto el problema en Estados Unidos.
Asimismo, en Reino Unido ha habido una escasez de transportistas durante los últimos meses como resultado de la pandemia, pero también de la salida de Reino Unido de la Unión Europea el 1 de febrero de 2020 (Brexit). Según la Road Haulage Association faltan 100,000 transportistas de carga (antes de la pandemia se calculaba que faltaban 60,000). Ante esta situación, el gobierno británico decidió ofrecer 5,000 visas para incentivar la llegada de transportistas desde el extranjero y así ayudar a solventar la escasez de trabajadores. Sin embargo, Brexit ha implicado que radicar en Reino Unido no sea atractivo para los transportistas provenientes de países miembros de la Unión Europea pues la libra esterlina ya no es tan fuerte frente al euro. Además, como ha cambiado la situación fronteriza, los transportistas pasan mucho tiempo detenidos en el cruce, y como cobran por kilómetro, no les resulta redituable. Aunado a ello, el gobierno británico está incentivando a que personas que tienen licencia de transportista y han dejado ese trabajo vuelvan a retomarlo. Además, con el fin de hacer el trabajo más atractivo económicamente, se ha aumentado el número de horas que es posible manejar (de 9 a 11 horas dos veces por semana) para poder ganar más dinero. No solo no se ha resuelto el problema, sino que incluso en octubre la falta de transportistas implicó que el ejército británico tuvo que encargarse de transportar la gasolina a las gasolineras.
Estados Unidos y Reino Unido no son los únicos países con escasez de transportistas en el norte global, por ejemplo se calcula que en España hacen falta alrededor de 16,000 conductores, 60,000 en Alemania y en Polonia 120,000. La falta de transportistas en el norte global denota que un trabajo esencial para la suministración de todo tipo de productos no es atractivo para las nuevas generaciones, lo cual será un problema todavía más grande en la próxima década cuando la mayoría de transportistas se hayan jubilado. Por ejemplo, en Reino Unido la edad promedio de estos trabajadores es de 55 años actualmente.
La escasez de transportistas no es el único problema que se enfrenta en el ámbito de trabajadores esenciales en el norte global. En diciembre de 2020, la Comisión Europea señaló que en 22 países de la Unión hay una escasez de personas que laboren en el sector médico y en el de cuidados. Esta situación ha hecho que durante la pandemia las personas dedicadas a la enfermería y el cuidado de personas mayores tengan jornadas laborales más largas y estresantes. Además, la mayoría de trabajadores de este sector tiene entre cuarenta y cincuenta años de edad, lo que implica que durante las siguientes dos décadas la mayoría se habrá jubilado.
Si bien la pandemia ha denotado la importancia de estos trabajos, los Estados, las empresas y la sociedad no han realizado cambios estructurales para mejorar la situación de trabajadores esenciales. Mientras se realizan paliativos como a) incentivar la llegada de personas del extranjero a ocupar estos puestos, b) solicitar que personas vuelvan a trabajar en el sector o c) aumentar salarios de manera mínima, no se reconoce con hechos la importancia de trabajadores esenciales que son la base para que fluya todo el sistema socioeconómico. Es necesario que se ofrezcan salarios altos así como jornadas y condiciones laborales justas, también el mismo respeto y exaltación como el que se da a otros profesionistas.
