Los Hechos Hablan, Pero se Miente Sobre los Estragos en Salud y Economía 

*2020: Cuando la Crisis Sanitaria Derrotó a la Economía

*México ya Está “Arañando” el Millón de Contagiados

*Un Muerto Tras Otro y una Mentira Tras Otra Octubre-Noviembre

*Saturado el Sistema Hospitalario Público del País y no se Admite

*La CDMX en el Filo de la Navaja Hacia el Semáforo Rojo

*El Nuevo Embuste: que sí hay Vacunas Contra la Influenza

*Y las Tensiones Crecen Entre la Federación y los Estados

Por Gerardo Lavalle

La falta de seriedad para contener la pandemia del coronavirus, ignorar los llamaos de la OMS, la laxitud de las medidas y priorizar la recuperación económica provocaron que México se colocará en el cuarto lugar de fallecimientos y en el noveno de contagios, porque “no impondremos medidas autoritarias”, dice el presidente López al tiempo de señalar que “si algún día me pongo el cubrebocas sería por respeto a la gente” -¿qué significa no colocarlo en sus eventos?

Durante el primer mes del Covid-19, el informe oficial con corte al 31 de marzo reveló que ya había registro de 29 muertos, mil 215 personas estaban infectadas y tres mil 511 eran casos sospechosos.

Al cierre de octubre, los muertos sumaron 91 mil 553 y los contagios arañaban el millón con 924 mil 962.

¿Por qué el explosivo crecimiento de muertes y contagios?

Porque la economía entró en la peor crisis registrada desde 1932 y el Producto Interno Bruto (PIB) cayó en el profundo pozo que provoca un retroceso del 18.7 por ciento contabilizado el segundo semestre, lo que en números fríos implicó una pérdida de 2 billones 100 mil millones de pesos comparado con el anualizado de 2018 que alcanzó la suma de 1,221 billones de dólares.

De marzo a junio se perdieron millón 345 mil empleos formales y en la informalidad el INEGI estimó hasta 12 millones de personas sin trabajar.

La crisis sanitaria derrotó a la economía y por ello el Gobierno federal tomó la decisión de reabrir industria, comercio y servicios bajo controles laxos que generaron el contagio masivo.

Se priorizó la economía, la recaudación para seguir con los programas federales y sus obras emblemáticas. Y debilitó las recomendaciones. En el tercer trimestre el crecimiento del PIB fue del 12.7 por ciento, pero al cierre del año la caída fluctuará entre el 9 y el 11 por ciento según las estimaciones de los expertos tanto nacionales como globales.

¿Cuánto representó la recuperación? En dinero 1.5 por ciento promediado entre 9 meses de mantenerse el PIB a la baja. Es decir, poco menos de 200 mil millones contra 2 billones de pérdida.

No importó el número de muertos. No ha importado.

Más aún: durante las últimas dos semanas se ha registrado un alarmante repunte de contagios y de fallecimientos; hay hospitales en Chihuahua, Durango, Coahuila, Nuevo León, Tabasco, entre otras entidades, saturados y el ejército ha tenido que trasladar hospitales móviles para ingresar a los pacientes contagiados y en estado de gravedad.

Bajo la premisa de “tener camas libres” en el sistema hospitalario público, miles de personas no fueron recibidas en los nosocomios y fallecieron en sus casas.

PRIORIZAR LA ECONOMÍA, ERROR

El Gobierno federal presionó –se ha documentado- al Consejo de Salubridad General –el órgano facultado constitucionalmente para determinar cierre o reapertura de actividades de todo tipo ante la presencia de una pandemia- para que modificara el semáforo sanitario y que en diversos Estados incluyendo la Ciudad de México, se pasará de rojo a naranja y de naranja a amarillo. Campeche ha sido el único con verde y el presidente ha informado que Chiapas está por alanzar ese color, con lo que las actividades económicas de ambas entidades estarán trabajando al ciento por ciento.

No obstante las declaraciones triunfalistas de funcionarios federales y estatales, el repunte del Covid-19 está obligando al sector salud a evaluar las condiciones en que se ha generado y está en la mesa de las decisiones regresar a cuando menos 8 estados al semáforo rojo, lo que implicará nueva paralización en las actividades no esenciales.

La Ciudad de México, ha reconocido la Jefa de Gobierno, podría regresar al color rojo si se mantiene la tendencia en el aumento de contagios y se utilizan más camas. Hasta antes de la segunda quincena de octubre, se hablaba de cambiar de naranja a amarillo con lo cual los servicios y comercios podrían tener mayor tiempo de permanecer abiertas. Sin embargo, actividades que estaban contempladas para reiniciar en la última semana de octubre fueron canceladas y se dará aviso de cuándo tendrán la opción de reabrir.

Frente a la carencia de medicamentos que frenen la pandemia, con el retraso anunciado por cinco empresas que trabajan en las vacunas y la presencia de la influenza A (H1N1) sin que exista dotación suficiente de vacunas tanto en el sector de salud pública como en el privado, los especialistas estiman que se complicará el control de ambos virus.

Aunque el Gobierno federal desplegó una campaña para informar que en todas las instituciones está la vacuna contra la influenza –que debe aplicarse anualmente- al igual que en 2019 no se cuenta con ella en cantidades suficientes para aplicarla a todos los ciudadanos.

En hospitales y clínicas del IMSS, ISSSTE, Salubridad, Pemex, entro otros, el desabasto es notorio y la información que se brinda a derechohabientes y quienes no tienen la seguridad social pero que también son recipiendarios es que será hasta fines de noviembre cuando exista la dotación para todos.

El Gobierno no ha reculado en sus medidas para impulsar la economía aunque el número de fallecimientos y de contagios por Covid-19 sigue al alza. La vida perdió valor frente a la crisis económica.

SALUD NO TIENE CIFRAS REALES

Al inicio de la pandemia el presidente López, el secretario de Salud y el vocero sanitario afirmaron que no se ocultaría nada y por ello se anunció que diariamente, en la mañana y por la noche, se darían las cifras reales de contagios y fallecimientos.

No obstante, los números que se daban a conocer cotidianamente distaban mucho de la realidad. Un ejemplo: el gobernador de Baja California, Jaime Bonilla tuvo enfrentamientos con el doctor López-Gatell por informar de menos muertes y contagios en la entidad. Lo mismo ocurrió con el mandatario de Querétaro, Francisco Domínguez y con el de Jalisco, Enrique Alfaro.

Ante la situación, el comisionado presidente del INAI, Javier Acuña dio a conocer que la Secretaría de Salud no tiene controles confiables de contagios y fallecimientos.

La Secretaría de Salud dijo que sí se tendría la información, pero que no estaba actualizada, por lo que no la podría entregar completa», expresó Acuña.

Por ello, dijo, el INAI ha ordenado a la Secretaría de Salud que entregue este subsistema epidemiológico de defunciones; es decir, sólo la lista de las personas que hayan muerto por causas relacionadas con una epidemia. Nosotros reclamamos directamente al sujeto obligado porque no tiene lo que debe tener (la información de muertes actualizada) buscamos instruir a la Secretaría de Salud a que entregue este listado completo», señalo el comisionado presidente del INAI.

Sin embargo, hasta el cierre de esta edición –el jueves pasado- la Secretaría de Salud no había cumplido la demanda del organismo encargado de difundir la información que solicitan los ciudadanos.

LA PANDEMIA, A SEGUNDO TÉRMINO

Desde agosto pasado la pandemia pasó a segundo término en los discursos del presidente López y si bien los doctores López-Gatell y el director general de epidemiología de la Secretaría de Salud, José Luis Alomía Zegarra, han continuado con la información diaria, los especialistas en pandemias afirman que no se incorpora un elevado porcentaje de personas que fallecieron por el Covid-19.

El presidente López ha dado prioridad al tema económico, a la detención de presuntos criminales de “cuello blanco” y ha mantenido diferendos con los inversores nacionales y extranjeros en materia de energías limpias y ha dejado de lado la crisis sanitaria, encargando al secretario de Relaciones Exteriores, Marcelo Ebrard, informe sobre los avances que registran las empresas farmacéuticas en las vacunas que se encuentran en proceso de ser avaladas para aplicarlas a las personas.

Otro de los temas que aborda el presidente un día sí y otro también es el proceso electoral del 2021 y cuestiona a los gobernadores de la Alianza Federalista por exigir recursos federales para la atención de los miles de personas infectadas. Sin importar la documentación que muestra cómo hay entidades en grave riesgo por la pandemia, el Jefe del Ejecutivo federal ha respondido que no habrá más dinero, que el Gobierno no les debe nada y que piden recursos para gastarlos en las campañas políticas del próximo año.

Las respuestas han tensado la relación con cuando menos 16 mandatarios en cuyos estados se registran elevado número de muertes y contagios y sus sistemas estatales de salud están por colapsar.

El escenario para los próximos tres meses no es mejor que el de ahora y podría empeorar al presentarse la influenza.

Sin embargo, desde la Presidencia de la República insisten: el Covid-19 está domado.

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