Por David Marklimo
Todo programa de política pública presenta una serie de indicadores o variables esenciales, que son las que decidirán si es o no un éxito. Esta máxima de la planeación, también es aplicable ahora para enfrentar la pandemia. Sabremos si tenemos éxito, dicen, si nos quedamos en casa; es decir, si aplicamos el distanciamiento social. Entonces, el éxito de evitar que se extienda la pandemia consiste en saber cómo se está respetando ese distanciamiento, tal cual se ha preguntado la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM). Las preguntas claves serían: ¿cómo sabemos si las medidas de distanciamiento social están realmente funcionando? ¿Qué impacto tendrán estas medidas a enfrentar el coronavirus? La respuesta tiene que ver con la movilidad de las personas. Hay varios fenómenos que nos pueden ayudar, de entrada, se nos ocurren tres, pero seguramente se nos escapan otros:
Un primer indicador en las ciudades es El tráfico. Cambios en los patrones de la congestión del tráfico pueden ayudar a medir el grado de distanciamiento social al capturar las decisiones de movilidad de las personas, así como las variaciones en la actividad económica. De acuerdo la red Smart Cities, el tráfico puede ser un indicio de una economía saludable ya que mide el traslado de las personas a su trabajo y el movimiento del comercio. Mientras que la capacidad de una vía es generalmente constante (a no ser que se mejore o expanda), el número de personas y comercio que transita una vía fluctúa en parte de acuerdo con la actividad económica.
Ligado al tráfico, pero también, en el ramo de la movilidad, podríamos encontrar otra variable: El transporte público. ¿Cuán congestionado están los camiones y los autobuses interurbanos? Es evidente que el comportamiento de las personas está cambiando día con día. Aunque esto puede ser parcialmente explicado por el miedo, el deseo de evitar el contagio, el monitoreo del uso del transporte público puede dar respuesta a si el distanciamiento social se cumple.
La mayoría de las ciudades están inundadas de Tecnología. De hecho, usando aplicaciones (apps) de derivadas de la telefonía inteligente podríamos sacar jugosos datos de los dos puntos anteriores. Pero no termina ahí el asunto. Ahora mismo, como una especie de gran hermano, se puede lograr identificar lugares y situaciones en las cuales hay una acumulación no recomendable de personas, para que los responsables de cada lugar puedan tomar acciones de inmediato. La tecnología es capaz de mostrar mapas de calor de ocupación del espacio, histogramas de permanencia, frecuencia en el uso de pasillos, así como probabilidades de recorrido, según la dispersión del espacio. En el contexto actual, esa información es valiosa porque permitirá tomar medidas para evitar la agrupación de muchas personas. No es exactamente un indicador de distanciamiento social, al contrario, es más bien, una reacción a su no respeto.
Estos análisis no son meramente curiosidades académicas: monitorear los efectos del distanciamiento social es muy importante. Existe evidencia en la Organización Mundial de la Salud (OMS) de brotes anteriores (la influenza en 2009 la y el brote de Ébola de 2014) de que el distanciamiento social puede limitar efectivamente la propagación de la infección. Proveer evidencia de dónde, cuándo y cómo estas restricciones están funcionando bien pueden guiar respuestas de política inmediatas que podrían salvar vidas.
Evidentemente, el siguiente paso es elaborar políticas públicas con respecto a esos datos del distanciamiento social. Quizá la mejor técnica para ello, sea El Semáforo (SdS), que debe complementarse con la geolocalización. De esta forma, tendremos una metodología que permita realizar el diagnóstico, el monitoreo y la auditoría interna y externa de las Prácticas de movilidad social. La implementación nos permitirá crear un sistema de toma de decisiones, un proceso estructurado que nos permita saber en todo momento en donde estamos parados, para buscar siempre el bien común. La fuerza de este método reside en la comprensión de que todo proceso comienza por la atención. Esta es el recurso más grande de este proceso.
| Verde | Amarillo | Rojo |
| Escenario ideal | Prepararse para evitar lo peor (fase de Introspección). Analizar la información | Atención del entorno – toma de conciencia focalizada |
| · Respetar las normas obligatorias a nivel nacional.
· Instituciones públicas: La máxima autoridad de cada institución regula la actividad laboral: Teletrabajo como prioridad. Pueden retomar trabajo presencial con máximo de 70% de su personal a la vez. Se faculta la organización de turnos para evitar aglomeraciones. · Empresa privada: todos los sectores no esenciales deciden el momento de retornar a sus actividades. Teletrabajo como prioridad. Pueden retomar trabajo presencial con máximo de 70% de su personal a la vez. Se faculta la organización de turnos para evitar aglomeraciones. · Circulación vehicular según placas pares o impares. · Se autoriza la atención de consulta externa de todas las especialidades médicas y las profesiones liberales. · Se autoriza el funcionamiento de comercios con aforo de máximo el 50%. |
· Respetar las prohibiciones vigentes a nivel nacional.
· Instituciones públicas: La máxima autoridad de cada institución regula la actividad laboral: teletrabajo como prioridad. · Pueden retomar trabajo presencial con máximo de 50% de su personal a la vez. · Se faculta la organización de turnos para evitar aglomeraciones. · Empresa privada: todos los sectores no esenciales deciden el momento de retornar a sus actividades. Teletrabajo como prioridad. Pueden retomar trabajo presencial con máximo de 50% de su personal a la vez. Se faculta la organización de turnos para evitar aglomeraciones. · Todas las actividades deben contar con protocolos y mecanismos de supervisión de síntomas para sus empleados y o clientes. · Se autoriza la atención de consulta externa de todas las especialidades médicas. · Se autoriza el transporte urbano: la ocupación por unidad será máximo el 30%. · Se incrementa la circulación vehicular a dos días por semana, según último dígito. Domingo prohibida la circulación de vehículos en actividades particulares. · Las actividades comerciales en locales comerciales podrá funcionar con un aforo máximo del 30% de su capacidad. |
· Respetar las normas obligadas a nivel nacional.
· Autorización de actividades comerciales, mediante pedidos por vía telefónica o en línea y entrega a domicilio: horario de entrega a domicilio de productos a 07:00 a 22:00. · Se autoriza el servicio de taxis y platoformas digitales entre las 05:00 a la 22:00, conforme las restricciones, según el número de placa. Aplica un 30% de descuento al personal de Salud, Policía y seguridad privada. · Se mantiene la suspensión de la jornada laboral, excepto en sectores esenciales, como ha funcionado hasta ahora. · Según el último número de placa: un día de circulación de automóviles por semana (prohibición fines de semana), como ha funcionado hasta ahora. · Restricciones a la circulación entre las 14:00 y las 05:00. · Autorización laboral solo en proyectos autorizados. |
Técnica del Semáforo aplicada a la movilidad de las ciudades bajo el COVID19. Fuente: Elaboración propia.
Es vital que se refuerce las medidas de protección ahora y usen todas las herramientas disponibles para ello. Son tiempos muy desafiantes para los países alrededor del mundo, donde asegurarse de que los ciudadanos se mantengan en casa y sigan estrictamente las recomendaciones de distanciamiento social puede realmente hacer una diferencia y salvar vidas. El otro lado de la ecuación, claro está, es medir el éxito en la salud pública. También ahí hay un gran material para debatir. Veremos cómo nos va en ello.
David Marklimo, fue observador electoral en 2006, 2012 y 2018.
