Los líderes de las fuerzas paramilitares proiraníes ordenaron este miércoles a los manifestantes levantar el asedio que tenían desde este martes en los alrededores de la Embajada de Estados Unidos en Irak.
“Ustedes han enviado su mensaje” dice el comunicado de los líderes de Hashd, fuerza paramilitar dominada por milicias árabes chiíes respaldadas por Irán.
Esto ocurre tras dos días de las concentraciones que militantes de la Hashd mantuvieron en protesta contra los ataques que realizaron aviones de Washington a una de sus instalaciones el domingo matando a 25 de sus compañeros.
Los líderes informaron que tras un acuerdo con el ministro de Relaciones Exteriores iraquí, Muhammad al-Hakim, decidieron levantar los plantones para “preservar el prestigio del Estado” pues “su mensaje ha llegado”, informó el grupo de medios Rudaw Media Network.
Previamente infantes de marina encargados de la seguridad de la embajada estadounidense en Bagdad, lanzaron gas lacrimógeno para dispersar a cientos de militantes del Hashd, que aventaron piedras, quemaron banderas e intentaron ingresar nuevamente a la sede diplomática.
El presidente Donald Trump culpó la víspera a Irán por el ataque a la embajada y el secretario de Defensa Mark Esper anunció más tarde el despliegue inmediato de un batallón de infantería de unos 750 soldados de la 82 División Aerotransportada del Ejército en el Medio Oriente.